Las tradiciones y costumbres entre las parejas evolucionan con el tiempo. Aunque es común regalarse rosas y flores amarillas a mediados de marzo, recientemente surgió la idea de que los enamorados se regalen una rosa y un libro para fortalecer su amor todos los 23 de abril de cada año. ¿De dónde viene este peculiar día y por qué precisamente son estos objetos? Quédate aquí y te lo explicaré en detalle en Gestión.
Hasta hace unos años, el Día de San Valentín era la única fecha para conmemorar el amor y la unión entre dos parejas que decidieron entablar una relación. Peluches, chocolates, cenas y hasta viajes son los regalos más comunes que se ofrecen el 14 de febrero. Sin embargo, los tiempos han cambiado, y las tradiciones también.
Para este 23 de abril de 2024, un nuevo acontecimiento se ha instaurado en el calendario de los enamorados. Y a diferencia del día de los enamorados, esta fecha resalta más por su sencillez y su originalidad a la hora de escoger los obsequios a entregar.
Aunque ha venido pasando inadvertido, el 23 de abril se conmemoran dos fechas especiales que tiene una gran importancia para las parejas. De hecho, este día también puede ser festejado entre amigos o familiares, en caso no tengas pareja o vengas pasando una decepción amorosa.
Con origen en Cataluña, España, el 23 de abril se celebra el Día Internacional del Libro y la celebración de la efeméride catalana de Sant Jordi. Tales celebraciones coinciden e incentivan la lectura en los jóvenes, a la vez que buscan renovar el sentimiento de amor entre dos parejas.
En caso no sepas el origen de ambas fechas, podrás conocerlo en las siguientes líneas de esta nota.
Según reporta la UNESCO, este día se estableció desde el año 1995 en homenaje a la muerte de dos de los más grandes escritores de la historia: el inglés William Shakespeare y el español Miguel de Cervantes.
A la par, esta fecha también coincide con el natalicio de grandes figuras literarias, por lo que en el Día Internacional del Libro se suele obsequiar ejemplares a tus seres más cercanos o simplemente acudir a bibliotecas en su conmemoración.
A pesar de la pluralidad de versiones sobre el origen de Sant Jordi, la historia que más peso tiene sobre esta figura narra que se trataba de un santo que seguía las órdenes del emperador Diocleciano.
Según cuenta la tradición, el emperador le ordenó a Sant Jordi que desaparezca a todos los cristianos, acción que el citado personaje desobedeció, ya que iba contra su moral y dogma religioso.
Tras este desacato, Sant Jordi fue condenado a la tortura y la decapitación. Tal gesto le valió para ser considerado como un mártir por la comunidad cristiana, por lo que no pasó mucho tiempo en ser venerado con rosas y flores.
Con el pasar de los años, sus historias han sido repetidas de generación en generación, alimentando así la leyenda de Sant Jordi en varias ciudades de España y fuera de ella.
La relevancia de este santo entre los enamorados radica en que durante las celebraciones en las que se solía venerarlo, parejas y novios jóvenes de todo el mundo acudían, por lo que en medio de las flores por el Día de Sant Jordi, también solían intercambiarse este tipo de obsequios los enamorados.
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