- La defensa de los hermanos presentará nuevas pruebas para que se vea el caso
- ¿A cuánto ascendía la fortuna de José Menendez y qué pasó con todo el dinero?
La vida de Lyle y Erik Menendez dio un giro radical tras asesinar a sus padres el 20 de agosto de 1989. Aunque en su defensa señalaron que lo hicieron para acabar con los abusos sexuales a los que fueron sometidos desde pequeños, la justicia determinó que solamente buscaban quedarse con la millonaria fortuna de sus progenitores. Después de un segundo juicio, en 1996, los hermanos fueron condenados a dos cadenas perpetuas sin posibilidad de salir en libertad. A raíz de que ha pasado varios años desde que cumplen sus sentencias y como salieron nuevos hechos que podrían ser usados como pruebas en contra de José Menendez, ¿existe la posibilidad de que salgan de prisión?
Como se recuerda, Lyle y Erik, que en aquel entonces de 21 y 18 años respectivamente, descargaron una ráfaga de disparos contra José y Kitty Menendez. Tras cometer el crimen con las escopetas calibre 12, que días antes habían adquirido, armaron su coartada: ir al cine y regresar poco antes de la medianoche. Una vez que entraron a su mansión en Beverly Hills, llamaron al 911 para dar cuenta del crimen. Al inicio no sospecharon de ellos, pero su radical cambio en sus estilos de vida despertó ciertas dudas, que luego se confirmaron cuando el menor de los hermanos confesó todo a su terapeuta.
Desde que fueron sentenciados, la defensa de los hermanos hizo de todo para revocar sus condenas, pero no obtuvo una respuesta favorable. La última vez que los abogados de Lyle y Erik presentaron una petición ante el Tribunal Superior del Condado de Los Ángeles fue en mayo de 2023, luego de que Roy Rosselló, exintegrante del grupo Menudo, acusó a José Menendez de abuso sexual, tal como lo reveló en el documental “Menendez + Menudo: Boys Betrayed”. “Este es el hombre que me violó. Este es el pedófilo”, dijo mientras señalaba una foto antigua donde se encontraba el individuo junto a la banda adolescente y su creador, Edgardo Díaz. Él tenía 13 años.
A pesar de ello, no se dan por vencido y ahora están citando una carta que recién fue descubierta. En ella, Erik le cuenta a su primo Andy Cano del abuso sexual de su progenitor. La misiva fue enviada ocho meses antes que cometieran el crimen.
“Nadie había mirado los efectos personales [del primo] hasta 2015, y fue entonces cuando se encontraron, 10 años después de nuestra última apelación. Estamos diciendo que el segundo juicio no se ajustó a las protecciones constitucionales por una variedad de razones; y un recurso de hábeas corpus tiene nuevas pruebas”, señaló Mark Geragos, el abogado postcondena de los hermanos Menéndez, en exclusiva a PEOPLE.
De acuerdo con él, la denuncia de Rosselló y la carta que envió Erik a su primo podrían servir para dar una luz de esperanza en la revisión del caso. Precisó que el juez puede optar por alguna de estas tres opciones: “Denegarlo, ordenar al fiscal que responda o puede hacer lo que hizo, que fue emitir una orden para que el fiscal respondiera informalmente, algo que se han tomado muy en serio durante los últimos 15 meses porque les hemos presentado pruebas”.
Adicional a ello, el abogado reveló que la hermana mayor de Kitty ha proporcionado la declaración de 24 miembros de su familia solicitando que revisen el caso. Considera que si en la actualidad hubiese llevado a juicio este caso, podría haber sido tratado como homicidio voluntario.
En tanto, un portavoz de la Oficina del Fiscal de Distrito del Condado de Los Ángeles también conversó con PEOPLE y le dijo que “están investigando las denuncias presentadas en la petición. El asunto está pendiente de la presentación de una respuesta informal, que actualmente debe presentarse el 26 de septiembre de 2024″.
El mismo medio estadounidense consultó el caso con el abogado defensor de Los Ángeles y exfiscal adjunto de distrito del condado de Los Ángeles, Dmitry Gorin, quien señaló que las posibilidades para que los hermanos salgan de prisión son muy escasas, pues aunque haya alguna prueba, esto no cambia la evidencia del caso. “Es trágico que hayan sufrido abusos, pero es más de lo mismo”, dijo.
En tanto, los hermanos Menendez, quienes ahora se encuentran juntos en la misma prisión, el Centro Correccional Estatal de Donovan, son muy cautelosos con lo que podría pasar, informó su abogado Geragos.
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