¡Varitas en alto para recordar a una actriz excepcional! Maggie Smith, la destacada actriz británica que volvió a conquistar al público con su papel en la franquicia “Harry Potter”, falleció este viernes 27 de septiembre a los 89 años. Originaria del Reino Unido, la histrionisa supo brillar en el cine como Minerva McGonagall y otros personajes que le merecieron dos Premios Óscar a fines del siglo pasado. ¿Sabías que tuvo que lidiar con varias enfermedades antes de su deceso? Aquí te cuento más sobre su historia.
Septiembre se despide con una noticia que dejará con los corazones rotos a todos los fanáticos de “Harry Potter”. Y es que Maggie Smith, actriz británica que dio vida a Minerva McGonagall en las 8 entregas cinematográficas, dejó de existir a sus casi 90 años de edad.
Protagonista de cintas de gran recuerdo, la nacida en Ilford en 1934 resaltó en el cine de su país y a nivel internacional, llegando a ganar prestigiosos premios como los Bafta y 2 Óscar a mediados de la década de 1970. Lastimosamente, la experta en artes escénicas tuvo que lidiar con diferentes problemas de salud que mermaron su salud durante varios años.
La partida de Maggie Smith significa el deceso de otra figura estelar del mundo mágico de “Harry Potter”, tras los fallecimientos recientes de Michael Gambon en 2023, y Robbie Coltrane en 2022. De esta manera, las estrellas del elenco del “niño que sobrevivió” se van extinguiendo con el pesar de los fanáticos.
Smith, quien tuvo una prolífica carrera de más de 7 décadas de vigencia, no solamente tuvo que lidiar con el estrés ante las cámaras y grabaciones. La actriz británica también se tuvo que enfrentar a diversas enfermedades que poco a poco fueron deteriorando su salud y estado de ánimo.
A inicios de 1988, se detectó en Maggie Smith la enfermedad de Graves, lo que la forzó a recibir radioterapia y a someterse a una operación ocular.
Según el informe de Express, cuando Maggie Smith contaba con 33 años y participaba en la obra Lettice, empezó a padecer síntomas pronunciados de la enfermedad, incluyendo la oftalmopatía de Graves, que impacta a aproximadamente un tercio de las personas que padecen la enfermedad.
Ella mencionó que pasó un año aislada en su hogar, durante el cual recibió radioterapia y cirugía en los ojos para frenar la inflamación y el dolor que sentía.
Felizmente para el cine moderno, Smith superó sus dificultades de salud con notable éxito, pero en 2008 y mientras rodaba “Harry Potter y el misterio del príncipe” a los 74 años, la vida le presentó otro obstáculo al recibir uno de los diagnósticos más duros que una mujer puede recibir: cáncer de mamá.
No obstante, la actriz persistió en su trabajo y logró superar la enfermedad, evidenciando ser una auténtica luchadora.
Este 27 de septiembre, Maggie Smith nos dejó, pero siempre permanecerá en nuestros corazones como la profesora Minerva McGonagall, la jefa de la casa de Gryffindor y la experta en transformaciones. ¡Te vamos a extrañar!
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