Los economistas de Bank of America Corp revocaron su pronóstico de recesión en Estados Unidos, convirtiéndose en el primer gran banco de Wall Street en revertir oficialmente su proyección en medio de un creciente optimismo sobre las perspectivas económicas.
El cambio se produce apenas una semana después de que el presidente de la Reserva Federal, Jerome Powell, dijera a los periodistas que los propios economistas del banco central ya no están pronosticando una recesión.
“Los datos recibidos recientemente nos han hecho reevaluar nuestra opinión anterior de que una recesión leve en 2024 es el resultado más probable para Estados Unidos”, escribieron el miércoles los economistas de BofA, encabezados por Michael Gapen, en una nota a los clientes.
“El crecimiento de la actividad económica en los últimos tres trimestres ha promediado un 2.3%, la tasa de desempleo se ha mantenido cerca de mínimos históricos y las presiones sobre los salarios y los precios se están moviendo en la dirección correcta, aunque gradualmente”, escribieron.
LEA TAMBIÉN: Musk quiere convertirse en el banquero que desafíe a Wall Street
La resiliencia de Estados Unidos este año, a pesar del ciclo de endurecimiento monetario de la Reserva Federal más agresivo en décadas, ha obligado a muchos en Wall Street a revisar repetidamente sus previsiones de cuándo el país entrará en recesión.
Ahora, en base a los datos recientes que muestran una fortaleza persistente en la contratación junto con una inflación moderada, los pronosticadores están comenzando a repensar completamente sus proyecciones de recesión.
Además de las revisiones al alza de sus pronósticos de crecimiento del PBI de Estados Unidos en 2023 y 2024, los economistas de BofA modificaron sus expectativas sobre cuándo y cómo la Fed recortará las tasas.
Los economistas del banco ahora prevén que los recortes comenzarán más tarde, en junio de 2024, y avanzarán a un ritmo más lento.
LEA TAMBIÉN: Inversores venderán acciones en corto en segundo semestre, según BofA
Cambio de opinión
Si bien algunos economistas, incluidos los de Morgan Stanley y Goldman Sachs Group Inc, sostuvieron durante el año pasado que Estados Unidos evitaría una recesión a pesar del rápido aumento de las tasas de interés, la mayoría de los bancos se han puesto del otro lado.
Aun así, Peter Hooperhooper y Matthew Luzzetti de Deutsche Bank AG dicen que la línea entre una recesión leve y un aterrizaje suave es “cada vez más fina”, una percepción cada vez más repetida por otros que proyectaban una recesión.
Una encuesta reciente a economistas de negocios mostró que una gran mayoría ahora dice que las probabilidades de que Estados Unidos entre en recesión en los próximos 12 meses son del 50 % o menos.
En un discurso reciente, la presidenta de la Fed de Cleveland, Loretta Mester, asintió al cambio de sintonía entre las empresas de su región.
A fines de 2022, “muchos de nuestros contactos comerciales nos dijeron que esperaban que la economía entrara en recesión este año”, dijo Mester. “Ahora, la mayoría piensa que no habrá una recesión este año”.
LEA TAMBIÉN: Morgan Stanley se suma a la carrera para recaudar capital
La columna vertebral de la economía y su resiliencia es el mercado laboral. El bajo desempleo, la contratación constante y el sólido crecimiento de los salarios han dado a los hogares estadounidenses los medios para seguir gastando.
La legislación defendida por la Administración Biden también está dando un impulso inesperado al crecimiento económico, una tendencia que podría sumarse a las razones por las que una recesión en Estados Unidos puede retrasarse o incluso evitarse.
Pero Estados Unidos aún no está fuera de peligro. Muchos economistas dicen que el impacto acumulativo del endurecimiento monetario aún no se ha sentido y, aunque la inflación ha disminuido, la resiliencia continua en el mercado laboral y el gasto de los consumidores podría frenar el descenso de la inflación, lo que llevaría a un mayor endurecimiento monetario por parte de la Fed.
Además, Fitch Ratings rebajó la calificación soberana de Estados Unidos el martes y la agencia argumentó que las finanzas del país probablemente se deteriorarán en los próximos tres años debido a los recortes de impuestos, las nuevas iniciativas de gasto, las crisis económicas y los repetidos estancamientos políticos.
LEA TAMBIÉN: Chile coloca bonos en pesos vinculados a la sostenibilidad
Disfruta tus descuentos del Club de Suscriptores cuantas veces quieras gracias a tu suscripción a Gestión. Más de 300 promociones esperan por ti, descúbrelas aquí. Y si aún no eres suscriptor, adquiere tu plan aquí