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Hay un aeropuerto en el mundo que tiene la categoría C por la complejidad de su pista de aterrizaje y necesita de pilotos con una formación especial para terminar su vuelo sin complicaciones. Solo existen 50 profesionales capaces de culminar su vuelo en esta parte del mundo que, durante varios meses, suspende sus vuelos para no poner en riesgo la vida de sus pasajeros.
Uno de los puntos importantes para que los pilotos puedan aterrizar en este aeropuerto es que tengan un alto conocimiento de la geografía local, a tal punto de que sepan todos los detalles del paisaje que rodea el lugar.
Por eso, los vuelos que salen o van a este aeropuerto deben cumplir las especificaciones necesarias y tener en cuenta ciertas características del país asiático para hacer vuelos seguros en situaciones muy particulares.
El Aeropuerto Internacional de Paro (PBH) es el más difícil de aterrizar y solo 50 pilotos están calificados para hacerlo por su extrema complejidad. Así lo contó el capitán Chimi Dorji a CNN Travel, quien ha trabajado 25 años en Bután y que entrena a otros pilotos para aumentar el número de profesionales que puedan hacer vuelos en este país asiático.
La dificultad de Paro radica en la geografía de esta parte de Bután, porque el aeropuerto está flanqueado por dos montañas y los pilotos solo pueden ver la pista de aterrizaje, de tan solo 2.250 metros de largo, cuando están por descender del cielo porque no tienen radar.
De igual manera, en el Paro no hay vuelos nocturnos por las condiciones del tiempo, que suelen tener fuertes vientos y lluvias por las noches. sumado a la falta de un radar en el aeropuerto. Por eso, los vuelos siempre se realizan a muy tempranas horas y nunca después del mediodía.
Si bien es un aeropuerto con un aterrizaje complicado, no es peligroso ni imposible de realizar, aseguró Dorji al citado medio de comunicación. De ser un caso extremo, no se realizaría ni un vuelo en Paro.
Entre junio y agosto, en el Aeropuerto Internacional de Paro se suelen suspender los vuelos porque es temporada de monzones y suelen darse tormentas eléctricas con granizo en esta parte de Bután.
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