¿Tiene una vida social activa?, ¿le gusta asistir al estadio, a conciertos y/o realizar actividades que planea sin mucha anticipación? Milagros Torres, subdirectora académica de la Facultad de Negocios de Zegel IPAE, brinda algunas recomendaciones para que esos gastos no afecten su presupuesto mensual.
“Lo más importante es tener un plan de ahorro. Es importante tener un presupuesto destinado para ocio que, dependiendo del caso, equivale entre un 10% a 15% de los ingresos mensuales”, menciona.
Asimismo, señala que al llevar nuestra organización financiera es importante tener un presupuesto anual, donde se consideren los días festivos y vacaciones para de esa forma adelantarnos a los gastos.
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Así, recomienda preparar un presupuesto diario en el que consignes los gastos de todas las actividades. “De esa manera, podrás decidir responsablemente si tus planes se ajustan a tu presupuesto”.
“Lo ideal es ahorrar un 10% de nuestros ingresos mensuales. Ese presupuesto acumulativo puede utilizarse en casos de emergencias, cubrir deudas relámpago o, incluso, divertirse. Así se evitará hacer un mal uso de las tarjetas de crédito o sobregirarse”, dijo.
En otro momento, resaltó la importancia de evitar los gastos hormiga. “Es decir, esos pequeños gastos que sin darnos cuenta van sumando cantidades importantes que pueden terminar perjudicando nuestro presupuesto. Evita estos gastos y conseguirás ahorrar dinero”.
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Si por ejemplo, recibe un ingreso adicional, ya sea por un trabajo extra, un bono o gratificación, José Carlos Kohagura, coordinador académico de Administración de Negocios Bancarios del instituto Certus, recomienda que antes de gastar es necesario crear una cultura de ahorro para contar con un respaldo financiero ante cualquier eventualidad u optar por otras recomendaciones que te permitan rentabilizar el dinero.
Es recomendable reservar un dinero de emergencia ante alguna eventualidad que se pueda presentar, por ejemplo, frente a situaciones de inestabilidad política y económica, salud, pérdida de empleo, etc. “Asimismo, el ahorro servirá para cumplir con una meta a largo plazo; por ejemplo, para una vivienda, viaje, educación, entre otros”.
“Este es un hábito que se debe cultivar, así se gane mucho o poco, y debe incluirse en el presupuesto mensual, considerando un porcentaje que puede ser desde un 10%, de tal manera, que nos permita acumular los fondos sin alterar el monto de los gastos”, agrega.
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Finalmente Kohagura resalta que un presupuesto personal o familiar no es algo fijo, sino que constantemente debe revisarse. Es recomendable evaluar nuestro presupuesto personal cada quincena o mensualmente y ajustarlo a los días festivos, vacaciones, etc.
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