Inflection AI, una startup que fabrica un chatbot “amable y solidario” llamado Pi, recaudó US$ 1,300 millones en una de las mayores rondas de financiación del actual frenesí de la inteligencia artificial en Silicon Valley.
La operación valora esta empresa de menos de dos años en US$ 4,000 millones, según una persona con conocimiento directo que pidió no ser identificada por tratarse de información privada.
Entre los cofundadores de Inflection AI se encuentran figuras de alto nivel de Silicon Valley: Reid Hoffman, cofundador de LinkedIn y socio de Greylock Parters, y Mustafa Suleyman, cofundador de DeepMind, el influyente laboratorio de inteligencia artificial de Google.
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La empresa también cuenta con una lista de inversionistas repleta de estrellas. Su nueva ronda de financiación fue liderada por Hoffman, el cofundador de Microsoft Corp. Bill Gates, el ex director ejecutivo de Google Eric Schmidt y Nvidia Corp. Las acciones de Nvidia se han disparado cerca de un 180% este año, gracias en parte a la demanda de sus chips para impulsar la IA.
Incluso en una época de obsesión de los inversionistas por las startups de IA, el acuerdo de Inflection AI destaca por su escala. La ronda de financiación eleva el total recaudado por la empresa a US$ 1,530 millones, según informó Inflection AI el jueves.
No ha revelado qué porcentaje de la operación es en efectivo y qué porcentaje corresponde a otras formas de valor, como créditos para tecnologías que potencian las herramientas de IA.
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La empresa informó que trabaja con CoreWeave y Nvidia para construir lo que llamó el mayor clúster de computación de IA del mundo, con 22,000 de los chips H100 de Nvidia, que están destinados a ser utilizados con grandes modelos de lenguaje en particular.
“La inteligencia artificial personal va a ser la herramienta más transformadora de nuestras vidas”, afirmó Suleyman en un comunicado. “Este es realmente un punto de inflexión”. El director ejecutivo de Nvidia, Jensen Huang, también se mostró entusiasmado de que la startup esté utilizando la tecnología de Nvidia para “desplegar modelos generativos masivos de IA que permiten increíbles asistentes digitales personales”.
El chatbot Pi de la compañía, que es una abreviatura de “inteligencia personal”, está diseñado para ser un asistente que proporcione “conversaciones de texto y voz, consejos amistosos e información concisa en un estilo natural y fluido”.
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