redacciongestion@diariogestion.com.pe
1 de 5
Nombres breves y representables. (Foto: iStock)
Nombres breves y representables. (Foto: iStock)

2 de 5
El poder de lo descriptivo. (Foto: iStock)
El poder de lo descriptivo. (Foto: iStock)

3 de 5
Un nombre para tu empresa con storytelling. (Foto: iStock)
Un nombre para tu empresa con storytelling. (Foto: iStock)

4 de 5
Testar antes de lanzar. (Foto: iStock)
Getty Images/iStockphoto
Testar antes de lanzar. (Foto: iStock)

5 de 5
Marcas globales. (Foto: iStock)
Getty Images/iStockphoto
Marcas globales. (Foto: iStock)

El naming forma parte del proceso de construcción de la marca. Y es una parte esencial. Aunque no hay recetas únicas para crearlo, aquí te ofrecemos algunos consejos que te pueden ayudar a encontrar el mejor nombre para tu empresa, según .

Nombres breves y representables

“Para mí hay cinco cosas que debe tener un buen nombre cuando se crea una marca: brevedad, cuanto más corto mejor, los nombres largos cuestan más de recordar. Y muy relacionado con la brevedad, que sean memorables. Con el nombre, el peor enemigo es la confusión. Si tu potencial cliente no lo entiende a la primera y no lo sabe escribir y decir a la primera, un porcentaje de la gente con la que interactúes no te va a comprar», apunta Franc Carreras, profesor de  y cofundador de .

Y añade: «Busca un nombre con palabras que se puedan visualizar. Lo que se puede imaginar se recuerda más que los nombres abstractos. Apple es un buen ejemplo. Una manzana tiene una forma muy clara y es mucho más fácil de recordar que Kodak, que no sabes lo que es y no tiene ninguna forma”.

El poder de lo descriptivo

Carreras defiende además “los nombres descriptivos. Por lo mismo. Porque así ya saben lo que estás haciendo y es mucho más fácil de recordar. Todos los negocios que he tenido han sido con marcas descriptivas: Somos digitales, una agencia de comunicación; Tuit Tertulia, una tertulia para comunicar lo que pasaba en Internet; Silicon Barri, una incubadora de empresas (barri significa barrio en catalán)».

«Otro factor importante», apunta Carreras, «es que el nombre sea pronunciable, especialmente ahora que están empezando a ser muy populares los asistentes de voz, y se busca por voz. Es algo que hasta ahora no nos había importado, porque todo era por escrito, o en digital, pero ahora cada vez más tienes que tener claro cómo suena. Si no es fácil de pronunciar, sobre todo si vas a más de un mercado, no funciona igual en diferentes mercados, están añadiendo confusión y menor conversión».

Y, por último, «que esté disponible el puntocom. Porque si tienes que enseñar a tu público que eres puntoes o puntoorg, ya pierdes gente. Tendrás menos conversión. Por eso suelo aconsejar combinaciones de palabras, que todavía están disponibles en puntocom y en redes. Hay una web, Namechk, donde se puede comprobar la disponibilidad de estos nombres”.

Son recomendaciones que no significa que sean la única alternativa. Y como muestra un botón: “Amazon es un nombre vacío porque es el nombre de un río y no se dedica a vender ríos. O a los ríos. Apple es otro nombre vacío porque no vende manzanas. Son nombres magníficos, pero son carísimos. ¿A qué me refiero? Que tienes que gastarte mucho dinero en llenar de significado una palabra que no tiene significado. Por eso es mucho mejor que el propio nombre ya diga lo que haces”, añade.

Un nombre para tu empresa con storytelling

Otra clave importante a la hora de conectar con el público: que el nombre te ayude a contar una historia. “Housfy es un nombre descriptivo (casas) y utiliza el fy de Spotify o Cabify que te hace pensar en comunidad. Si vas a un público digital lo entenderá.  Luego hay nombres como Hawkers, que es buenísimo porque pretende dar una imagen californiana, aunque no lo es. Como Massimo Dutti, que parece italiano pero es de Inditex. Esto se hace por  que también es un factor importante a tener en cuenta. Mi consejo es poner nombres eficientes, pero no perder de vista esa oportunidad de contar una historia”, añade Carreras.

Otro ejemplo muy bueno de una marca que acaba de lanzarse al mercado: Aristopet, artículos lifestyle premium para mascotas. Han creado la aristoguide para dar consejos sobre cuidados y planes con mascotas, un espacio particular para desarrollar todo su storytelling.

Testar antes de lanzar

Antes de decidirte por el mejor nombre para tu empresa “tienes que averiguar qué necesita la persona a la que quieres vender. En una marca como Kiki (una web de contactos para ligar) que es un target joven, puedes utilizar el naming como un guiño divertido porque sabes que el target al que te vas a dirigir lo va a recibir muy bien. De todas formas, en los primeros procesos del branded debe haber una investigación para constatar que la marca, más allá de la parte legal y de registro, no tenga ningún inconveniente para estar en el mercado” apunta Álvaro Villajubín, fundador y CEO de .

El testeo de la marca es fundamental para todos los expertos. “Siempre antes de lanzar una marca hay que validarla en el mercado, hacer pruebas. Se puede hacer con un anuncio de Facebook que lleva a una página que explique lo que hacemos, por ejemplo. Y medir los resultados: a cuántas personas hemos impactado y estudios de mercado de reconocimiento de marca. Haces una entrevista a personas y les preguntas si les suena la marca, si la conocen y a qué la asocian», asegura Andy Stalman, cofundador y CEO de .

«Es costoso y complejo, pero es lo más valioso para valorar si estamos consiguiendo nuestro objetivo o no”, comenta Franc Carreras. “Testeo de prueba y error, para terminar de refinar bien y ser creativos. No hay que centrarse en encajar en una categoría, sino buscar cómo destacar en esa categoría. En España tenemos Cotizalia, Calidalia, Reparalia, Opticalia, Arboralia… Hay que evitar estas construcciones. Cuando hay una marca que se anima a desafiar lo establecido casi siempre le va bien”, añade Stalman.

Marcas globales

“Si le hablas a todos no le hablas a nadie. De alguna manera tienes que definir tu audiencia, pero tienes que definir tu audiencia hoy pero también proyectar tu audiencia a cinco, diez y veinte años. No se puede pensar solamente en un contexto coyuntural, tienes que pensar también en cómo vas a crecer y desarrollarte. Tu marca tiene que pensar que puede ir a otros destinos. Tiene que pensar cómo te pronuncia, cómo se entiende o cómo se interpreta. O por lo menos que no tenga connotaciones negativas al menos en los idiomas más conocidos, el inglés y el francés”, apunta Andy Stalman.