Los proyectos mineros de gran capital suponen riesgos y aumento de costos si no se tiene una planificación temprana. De acuerdo con un artículo publicado en el Mining Journal, la mayoría de ellos, sean greenfield o brownfield, pueden tardar 25% más de tiempo en completarse y por lo general superan el presupuesto hasta en un 30%.
Por esa razón, es importante que las empresas mineras puedan administrar sus proyectos de capital de una manera más efectiva, con permisos y responsabilidades ambientales, a fin de evitar sobre costos y exceso de tiempo. En tal sentido, la metodología de la ingeniería de valor (value engineering en inglés), permitiría reducir los gastos de capital en un 100% y duplicar el Valor Actual Neto (VAN) de las compañías.
“El valor se puede conseguir de dos maneras, reduciendo el CAPEX o mejorando los rendimientos futuros que se pueden optimizar incrementando los ingresos; porque aumentas producción, la adelantas o revisas los costos”, sostuvo Rafael Agudo, managing director and partner de Boston Consulting Group (BCG)
Lo que se busca aplicando la ingeniería de valor es aumentar el Valor Actual Neto de un proyecto y ello se hace en minería considerando una visión de décadas. Agudo señala que existen medidas que se deben tomar durante la ejecución de un proyecto para reducir la inversión o tiempos, sobre todo durante los primeros años.
Si bien esta metodología se puede aplicar en cualquier fase de la mina, posterior a la exploración, adquiere mayor potencia cuando se realiza cuanto más pronto se haga, porque tiene más grados de libertad.
“Conforme avanza un proyecto, llega un momento en que se han tomado algunas decisiones que involucran el futuro. Por lo tanto, cuanto antes se aplique este la ingeniería de valor, mayor impacto se podrá lograr”, indicó el experto.
Procesos
BCG considera que las empresas mineras, con el fin de insertar una ingeniería de valor en sus procesos, deben alinear las necesidades de negocios, desarrollar iniciativas para generar valor requerido y capturar el valor y mejores prácticas.
En los procesos es primordial revisar las formas en que se puede maximizar el VAN y en qué zonas se pueden reducir los riesgos del proyecto, con el fin de evitar crisis. En el caso peruano, la mayor parte están vinculadas a temas sociales, por ello es que muchas compañías destinan gran parte de sus recursos a trabajar en ese aspecto a fin de no verse sorprendidos con paralizaciones y posibles cierres.
Las empresas mineras para llevar a cabo un mejor proyecto, de acuerdo con BCG se deberían concentrar en encontrar oportunidades para optimizar los diseños durante el proyecto. Para ello, la participación en talleres con los stakeholders es primordial, para abordar simplificación de procesos y soluciones. “Toda la organización del proyecto tiene que embeberse con esta metodología”, dijo Agudo.
Cada iniciativa priorizada dentro de la compañía debe ser exhibida a los propietarios de la mina, el valor que se espera obtener y las metas a alcanzarse. También, BCG sugiere tener reuniones frecuentes para diseñar planes de control y seguimientos al plan.
Esta ingeniería de valor puede ser llevada a cabo en departamentos especializados, aunque debe ser transversal y transmitirla para conseguir un cambio en el diseño. Para evitar riesgos y crisis, las empresas mineras deben conocer qué proyectos son los adecuados y deben priorizarse.
“Muchas empresas no aceptarían un mayor riesgo medioambiental, pero podría aceptar un 20% de probabilidad de ocurrencia en la desviación en tiempos. Con eso consigue una valoración mejor del proyecto global, porque un 80% mejoraría los resultados sin que hubiese esa desviación de tiempo”, argumentó Agudo.