Cada jugador del Powerball tiene una historia distinta. Cheng Saephan es uno de los tres ganadores de los 1,300 millones de dólares del Powerball del 7 de abril y tomará parte de su nueva fortuna para tratar el cáncer contra el que lucha desde 2016. A sus 46 años, el jugador ha conseguido tener un premio mayor y ha contado los pormenores detrás de la compra del boleto ganador. La lotería de Estados Unidos le ha dado una oportunidad más para seguir luchando y tener a su familia en una situación distinta en lo económico.
Hay tantas respuestas como ganadores de la lotería sobre lo que harán con los millones ganados. Por ejemplo, se ha sabido que Theodorus Struyck le ha puesto la mira a una casa de 1,5 millones de dólares tras ganar el Powerball.
Mientras que un abuelo ganador de 1 millón de dólares de Powerball en Illinois ha decidido que su primera parada para gastar su fortuna es Disney World. Comodidades, lujos, placeres, pago de deudas, por esos caminos transitan los premios de la lotería.
Saephan, por supuesto, invertirá su dinero en tratar el cáncer que lo aqueja desde hace ocho años. ¿Cómo obtuvo el boleto ganador? No fue por un error de un vendedor como le sucedió a una mujer de Maryland, sino que él se fabricó su propia suerte.
Cheng Saephan es un paciente con cáncer que, junto a otros dos jugadores, acertó los números ganadores del premio mayor de los 1,300 millones de dólares, durante el sorteo del 7 de abril, en Estados Unidos.
Saephan lucha contra la enfermedad desde 2016 y se encontró en un proceso de quimioterapias cuando se enteró que era una de las personas que tenía el boleto ganador con los números 22, 27, 44, 52, 69 y el Powerball rojo 9.
El ganador es un jugador recurrente de la lotería e, incluso después del millonario premio, dijo a la Lotería de Estados Unidos, en Salem, Oregon, cuando recogió su dinero, que seguiría jugando para probar su buena suerte.
Cheng, además, contó que compró 20 boletos del Powerball para ese sorteo, junto a su esposa y una amiga, y que, días antes de saber los resultados, escribió sus números en una hoja de papel y la colocó debajo de su almohada para dormir.
Tenía la premonición de que algo iba a suceder, y así pasó. “Recé a Dios para que me ayudara. Mis hijos son jóvenes, y yo no estoy tan saludable”, manifestó Saephan.
Cheng Saephan recibió 422 millones de dólares, con los impuestos cobrados, al ser uno de los tres ganadores del jackpot de Powerball. Dijo a las autoridades de la lotería que invertirá el dinero en su tratamiento contra el cáncer y en dejar una seguridad económica para su familia, ya que no ha podido trabajar desde 2016, cuando le diagnosticaron la enfermedad.
“Puedo proveer para mi familia y mi salud. Mi vida ha cambiado. Ahora puedo bendecir a mi familia y contratar a un buen médico para mí”, manifestó Saephan, natural de Laos, quien se mudó a Estados Unidos en 1994.
Agregó que también piensa comprar una casa para sus seres queridos. “Me sentí emocionado… Estaba pensando en mi familia, ellos tendrán una buena vida. Estoy agradecido por la lotería y cómo he sido bendecido”, enfatizó.
Contenido GEC