En el dinámico mundo laboral actual, la capacidad de influir y persuadir puede marcar la diferencia entre el éxito y el estancamiento profesional. Según expertos en comunicación y estudios recientes, dominar el uso de ciertas palabras y expresiones puede potenciar significativamente nuestra capacidad de persuasión en el trabajo. Estas herramientas no solo nos ayudan a comunicar nuestras ideas de manera más efectiva, sino que también fortalecen nuestras relaciones laborales y pueden abrir puertas hacia nuevas oportunidades de desarrollo profesional. Hoy en Gestión Mix exploraremos cuatro palabras clave que, según los especialistas, pueden hacer que nos volvamos más influyentes en el entorno laboral actual.
Estas habilidades persuasivas pueden ayudar a que tus proyectos obtengan apoyo o incluso a conseguir una promoción, según Matt Abrahams, profesor de comunicación de la Universidad de Stanford. “Las carreras son muy diferentes ahora ... las cosas son más remotas y virtuales, así que no estás tanto alrededor de las personas”, comentó Abrahams a CNBC Make It. “Realmente estás forjando tu propio camino y necesitas al menos obtener el apoyo, si no seguir, las cosas que estás intentando hacer”.
Aquí tienes cuatro palabras simples que cualquiera puede utilizar para ganar más influencia en el trabajo:
Ya sea que estés pidiendo cortar la cola o explicando tu razonamiento en una presentación, la palabra “porque” puede hacerte más convincente, según el profesor de marketing de Wharton, Jonah Berger. Berger hizo referencia a un estudio de Harvard hace casi 50 años, donde los investigadores esperaban a que alguien usara la fotocopiadora de la universidad y luego les pedían cortar la línea con tres preguntas diferentes:
Ambas solicitudes que utilizaban “porque” tuvieron una tasa de éxito un 50% más alta: más personas permitieron que los investigadores se adelantaran, encontró el estudio. Incluso la segunda formulación, que básicamente significaba “¿Puedo hacer lo mismo que estás haciendo, pero primero?”, funcionó porque mostraba más consideración hacia la persona que ya estaba haciendo copias, sugirieron los investigadores.
Sustituir “gustar” por “recomendar” tiene un poder similar, escribió Berger en su libro “Magic Words: What to Say to Get Your Way”. El simple cambio de palabra hace que las personas sean un 32% más propensas a aceptar tus sugerencias, según un estudio de 2017 coautorizado por Berger.
“‘Gustar’ sugiere una preferencia personal, mientras que ‘recomendar’ sugiere que a otros también les gustará”, dice Berger. “Y el hecho de que los endorsers estén dispuestos a recomendar sugiere que les gusta”. De manera similar, el tiempo presente es más persuasivo que el pasado, porque generaliza tu experiencia y te hace sonar más seguro, descubrió Berger.
Saber cómo y cuándo pedir ayuda puede hacerte más influyente, según Henna Pryor, una coach de rendimiento laboral de Filadelfia. Investiga y trata de llegar a conclusiones por tu cuenta. Luego, cuando tengas dudas, admitir que necesitas orientación adicional podría ahorrarte tiempo, dinero y tu reputación, dijo Pryor.
Simplemente preguntar puede ayudarte a construir confianza y relaciones: a las demás personas generalmente les gusta sentirse necesitadas, y tal vez acudan a ti para un favor futuro. Tener ese tipo de conexiones en el trabajo es particularmente útil cuando necesitas probar ideas, dijo Pryor: puedes ensayar con ellos antes de presentar una idea, pedir un aumento a tu jefe o incluso intentar pronunciar el nombre de un compañero de trabajo.
Utilizar un lenguaje inclusivo como “nosotros” en lugar de “tú” y “yo” puede hacer que las personas estén más receptivas a tus argumentos, según una investigación psicológica de la Escuela de Negocios de Stanford publicada el año pasado.
Cuando los investigadores pidieron a los participantes que recibieran retroalimentación hipotética sobre un proyecto grupal que salió mal, los participantes prefirieron escuchar “Deberíamos haber progresado más” en lugar de “Deberías haber progresado más”.
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