El seguro de vida con devolución, que también es conocido como “con retorno”, ha crecido significativamente en el mercado peruano en los últimos meses. Esto debido a que son más accesibles y brindan la alternativa de recuperar lo invertido, que puede ser de mucha utilidad para el mediano o largo plazo.
“Un seguro de vida con devolución o seguro de vida con retorno como también se le conoce, es aquel que brinda protección durante un plazo determinado, desde los 6 años hasta los 15 años, y una vez terminado ese período se devuelve la totalidad de las cuotas pagadas hasta el 150% en caso no haya fallecido el titular del seguro”, explica Alfredo Chan Way, Gerente Comercial de Rentas de Protecta Security, en declaraciones a Andina.
Chan Way menciona tres ventajas o razones para optar por este tipo de coberturas de vida:
Seguridad financiera
Permite proteger al asegurado y su familia al tener una cobertura de un seguro de vida durante el periodo contratado. Este periodo fluctúa entre los 6, 8, 10, 12 y 15 años.
Durante los años que el cliente paga sus cuotas mensuales los beneficiarios de la póliza estarán cubiertos en caso el asegurado fallezca, ya sea por muerte natural o accidental, recibiendo el monto correspondiente a la suma asegurada.
Ahorro
Este seguro funciona muy bien como una forma de ahorro, ya que al culminar el periodo elegido se le devuelve al contratante los pagos realizados mensualmente más el porcentaje de devolución pactado.
El monto recuperado, por el seguro de vida con devolución, finalmente se puede invertir en otras necesidades de la familia como solventar estudios, proyectos personales, completar su jubilación etc.
Accesible
Otro beneficio o ventaja es que es un producto bastante accesible y sencillo, se puede adquirir desde 30 soles, dependiendo de la compañía. El asegurado elige a los beneficiarios, plazos, coberturas, porcentaje de devolución, etc.
Chan Way señala que es primordial contratar un seguro que brinde un importe razonable de cobertura a los familiares en caso de ausencia del titular, de acuerdo a los gastos educativos, manutención, alquileres, entre otros gastos adicionales.
Es preferible contratar este producto a una edad temprana (a partir de los 18 años), pues permite tener un costo más bajo de la prima del seguro y a la vez, tener una mayor probabilidad de recuperar el dinero invertido cuando finalice el periodo elegido.
“En resumen, este tipo de seguros de vida no solo ofrecen seguridad financiera, nos permite ahorrar, y además brindan un seguro ante eventos fortuitos que pudieran interrumpir la vida del asegurado, garantizándole cubrir gastos primordiales a los beneficiarios”, finaliza Chan Way.
Con información de Andina.