La innovación empresarial: ¿realidad o cliché?

Todas las épocas de nuestra historia están marcadas por ciertas tendencias de pensamiento. Estas no son ajenas al mundo comercial, particularmente desde el surgimiento del marketing. El panorama cambia cuando la tendencia, más allá del pensamiento, pretende vender un producto que no corresponde con lo que dice ser.

Esta es la crítica que Leslie Kwoh, periodista de Wall Street Journal , hace al uso indiscriminado de todo aquello relacionado con este término. "Las compañías ofrecen directivos de innovación, equipos de innovación, estrategias de innovación y hasta días para la innovación", señaló.

Tal promoción de este práctica no se traduce en productos innovadores, afirmó. "Al contrario, están usando la palabra para transmitir la idea de un cambio formidable cuando el progreso que están describiendo es bastante ordinario". Así como sucedió con las palabras "sinergia" y "optimización", es posible que la innovación esté en riesgo de convertirse en un cliché.

Ideas candentesKwoh se sirve de la documentación encontrada en la Oficina de Información para Inversionistas (SEC , por sus siglas en inglés), donde logró encontrar cuántas veces se utilizó la palabra 'innovación' en los reportes trimestrales y anuales de las empresas norteamericanas. El resultado es impactante: 33,528 menciones, lo cual representa un incremento del 64% en comparación a los últimos cinco años.

¿Qué empresas utilizaron más el término? Sorprendentemente, las empresas de la industria tecnológica no están solas en la lista. Google y Apple mencionaron "innovación" 22 y 14 veces, respectivamente, en sus reportes anuales más recientes. Fueron igualados por Procter&Gamble (22 veces), Scotts Miracle-Gro fabricante/distribuidor de gras artificial con 21 menciones y Campbell Soup Co. (18 veces).

Nuevo mercadoOtra consecuencia de popularidad de esta palabra es el nacimiento de un mercado de consultores. Las empresas dentro de los ranking de Fortune 100 pagan entre US$ 300,000 y US$ 1 millón a los consultores por tan solo un proyecto, que en total puede representar un gasto de entre US$ 1 millón y US$ 10 millones al año, según un vocero de la consultora Booz & Co.

Scott Berkun, autor del libro Los mitos de la innovación (2007), que trata sobre la disolución de esta palabra, dice que lo que la mayoría de gente llama 'innovación' es usualmente un "muy buen producto". Berkun es consultor en innovación y lo primero que recomineda a su clientes es prohibir esa palabra.

Para el autor, la innovación está reservada para las invenciones que cambiaron la civilización, como la electricidad, la imprenta, el teléfono y, más recientemente, tal vez el iPhone. Dicho esto, habría que escatimar más entre nuestro vocabulario antes de asignarle la categoría de "innovador" a cualquier producto actual.