(Bloomberg) Una empresa emergente poco conocida en China se propone ser la primera en vender teléfonos inteligentes flexibles este año en un intento de eclipsar a Samsung Electronics Co., que ha comenzado a incursionar en la tecnología de pantallas flexibles.
Moxi Group, con sede en Chongqing, dice que despachará 100.000 de estos dispositivos en 2016. Son, como mínimo, únicos. Los teléfonos, que se venderán por unos 5.000 yuanes (US$765) cada uno, están diseñados de tal manera que se enrollan como un brazalete y se llevan en la muñeca. Las pantallas táctiles funcionan estando enrolladas o pueden desplegarse en rectángulos para usarlas como cualquier otro teléfono inteligente.
Por ahora, los aparatos presentarán solamente visores en blanco y negro, en tanto más adelante habrá una versión color. De todos modos, esto da a Moxi suficientes derechos a fanfarronear por superar a otros fabricantes de teléfonos inteligentes siendo la primera empresa que lanza productos flexibles.
"Los teléfonos en blanco y negro son mucho más fáciles de fabricar", dijo Chongsheng Yu, vicepresidente ejecutivo de Moxi. "El consumo de energía del modelo en color también es mucho más alto que el de la unidad en blanco y negro. Lo venderemos en China y si hay demanda en el exterior, lo analizaremos".
Las pantallas blandas se basan en la tecnología del grafeno, en la cual los átomos de carbono se disponen en una forma específica volviéndose más conductores y resistentes. En vez de colocar todas las piezas del teléfono inteligente detrás de la pantalla flexible, Moxi apiñó la batería, el procesador y otros componentes en un extremo del aparato. Esto permite que la pantalla prácticamente se doble formando un círculo completo. Una cuestión clave es cuán buena será la pantalla.
"Si están usando tinta electrónica flexible, no servirá", dijo Roel Vertegaal, director del Human Media Lab en Queen's University de Canadá, que exhibió su propio prototipo de teléfono flexible utilizando esta tecnología hace cinco años. "Era la única tecnología flexible disponible, pero los colores son malos, los contrastes son malos y no se pueden reproducir videos".
Yu dijo que el teléfono flexible está basado en tinta electrónica, que es también utilizada en los dispositivos Kindle de Amazon.com, pero es superior a lo visto hasta ahora porque utiliza mejores capacidades de pantalla táctil.
De todos modos, el deseo de encontrar un nuevo producto exitoso está impulsando los esfuerzos destinados a introducir teléfonos flexibles. Moxi, cuyo nombre empresarial oficial es Chongqing Graphene Tech Co., está tratando de aprovechar al máximo una tecnología que en definitiva podría fortalecer las ventas en un mercado que comienza a desacelerarse.
Las ventas de teléfonos inteligentes en la industria de US$423.000 millones bajaron por primera vez en los tres primeros meses de este año, según Strategy Analytics.
"Si fabrican un teléfono flexible que funcione, el mercado es enorme", dijo Aravind Vijayaraghavan, investigador en el área del grafeno en la Universidad de Manchester. "Me impresionaría muchísimo que lo lanzaran comercialmente este año. Tener una pantalla en blanco y negro de baja resolución no es algo terriblemente confiable, por ende, no es una perspectiva comercial".