De acuerdo al reglamento para escuelas privadas que prepublicó el Ministerio de Educación, existirán hasta 15 causales para cerrar una institución educativa.
Entre ellas, figuran otorgar certificados de estudios a personas que no cumplan con los requisitos o alterar notas en las actas de evaluación o certificados de estudios.
Además, en el documento, publicado el último lunes se contempla aplicar multas que van desde 1 UIT (S/ 4,150) en caso de una infracción leve hasta las 100 UIT (S/ 415,000) en caso de un hecho grave.
Al respecto, el presidente de la Asociación de Colegios Particulares Amigos (Adecopa), Jorge Camacho, se mostró en contra de la imposición de una multa que supere las 100 UIT.
Recordó que este fue uno de los puntos por los que no se aprobó en el 2016 el reglamento. “Ser multado solo con diez UIT por una infracción leve podría implicar, en algunos casos, el cierre del centro educativo, dado que en su mayoría (los colegios privados) son pequeños, llegando a cobrar S/ 200 de pensión”, señaló a gestion.pe.
En peligro
La medida abre el camino para que se cierren al menos 1,500 colegios que están en la informalidad educativa.
Precisamente, el titular del sector, Daniel Alfaro, indicó que el Ejecutivo impulsó esta medida debido a que en la capital hay 46,000 alumnos que se encuentran estudiando en dichos centros de estudios.
En esa línea, el ministro sostuvo que el reglamento busca sentar las bases de políticas de supervisión y fiscalización de escuelas privadas con el objetivo de favorecer la formalidad de la calidad educativa (Gestión 14.11.2018).
Reparos
Hugo Díaz, consejero del Consejo Nacional de Educación, consideró que el reglamento no será un soporte que ayude a mejorar la educación privada, pues no se toma en cuenta lo que hacen las buenas instituciones.
“Al final, la Sunat, Indecopi, el propio Minedu terminan acosando a los colegios con más prestigio para que cumplan las normas y en cambio se deja funcionar a colegios con escasa calidad”, anotó
Señaló a Gestión que además se les exigen estándares que no se les piden a los públicos, como, por ejemplo, el equipamiento.
Considero que colegios malos deben ser cerrados y para ello no se necesita este reglamento sino un proceso de licenciamiento, como ocurre hoy con las universidades, y el que no se adecue se clausure.