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El congresista Edgar Alarcón presentó este miércoles una prueba positiva de COVID-19 junto a un certificado médico al Parlamento. Por ese motivo, ha solicitado la reprogramación del debate de denuncia constitucional en su contra programado para este viernes ya que se estaría vulnerando su derecho a la defensa si no puede ejercerla en la sesión del pleno.
El diario La República difundió los resultados de la prueba del legislador que se conocen horas después de que abandonó la sesión de la Comisión de Fiscalización del Congreso arguyendo que tenía problemas de salud.
El pedido del legislador busca garantizar su derecho a la defensa debido a su licencia médica por haber contraído la COVID-19.
El pasado viernes 5 de marzo, la Comisión Permanente aprobó que la acusación constitucional contra Alarcón, por ser el presunto autor del delito contra la administración pública en agravio del Estado peruano, pase al pleno del Congreso.
Esta denuncia fue presentada por la fiscal de la Nación, Zoraida Ávalos, en julio del 2020 por la presunta comisión del delito por enriquecimiento ilícito agravado en su condición de excontralor.
El Ministerio Público indica que Alarcón presenta un desbalance patrimonial de S/201.337,24, correspondiente al periodo del 9 de junio del 2016 al 4 de julio del 2017.
En su defensa, Alarcón aseguró que la acusación en su contra “carece de sustento” y que el informe final de la Subcomisión de Acusaciones Constitucionales “es una copia de la denuncia del Ministerio Público”.