El 89% de la población que vive en la región amazónica de Perú no dispone de agua potable.
El 89% de la población que vive en la región amazónica de Perú no dispone de agua potable.

La Fundación Aquae ha prorrogado su proyecto “Agua para la Amazonía Peruana” destinado a que la población indígena de las regiones amazónicas de Loreto y Ucayali acceda a servicios de agua y saneamiento que pueda garantizar una higiene adecuada contra la propagación del coronavirus.

Aquae y Unicef España pusieron en marcha este proyecto en el 2014 y hasta hoy han implementado más de 420 baños ecológicos secos para más de 700 familias de entornos rurales en las de Loreto y Ucayali.

Estas soluciones unifamiliares incluyen un lavadero de manos y un doble depósito que permite transformar los desechos en compost utilizable para el cultivo, según informa Aquae, que añade que muchos de estos baños se construyen a una altura mínima aproximada de un metro para asegurar su resistencia durante los nueve meses que dura la época de lluvias y la crecida de los ríos.

El 89% de la población que vive en la no dispone de agua potable y, según Mariola Urrea, presidenta del Consejo de Estrategia de Fundación Aquae, esa situación dificulta las medidas higiénicas recomendadas contra contagios por el coronavirus por lo que, asegura, han decidido ampliar su colaboración “el tiempo necesario hasta que la pandemia en esta zona de Perú esté controlada”.

Perú, que suma más de 309,000 positivos y más de 10,900 fallecidos por el COVID-19, es el octavo país del mundo más afectado por el virus en volumen de casos por millón de habitantes y el tercero más golpeado en América Latina y, aunque la cuarentena se levantó el pasado 1 de julio en casi todas las regiones, el estado de emergencia, vigente desde hace 106 días, se ha ampliado hasta el próximo día 31.

“La capacidad del sistema sanitario de Perú es muy limitada. Grandes ciudades como Lima o algunas urbes de la costa norte o sur del país están mejor preparadas para atender urgencias sanitarias. Sin embargo, esta capacidad está muy disminuida en algunas regiones del interior, sobre todo en algunas donde trabajamos junto a Fundación Aquae, como son Loreto y Ucayali”, destaca Hugo Rázuri, especialista en Salud de Unicef Perú.

Rázuri dice además que las poblaciones que viven a lo largo de los ríos, en el interior de Perú, se encuentran en una situación de especial vulnerabilidad frente a esta pandemia por las dificultades de acceso y por la carencia de infraestructuras y de agua potable y recuerda que los pueblos indígenas amazónicos tienen muy mala cobertura de salud, educación, agua y saneamiento.

En la última fase del proyecto “Agua para la Amazonía peruana”, Aquae y Unicef han conseguido influir en las políticas del país andino incorporando su modelo de trabajo a la normativa estatal de saneamiento rural.