Algunos ejecutivos pueden descubrir que ya no contribuyen a la organización como antes, ya sea porque están saturados, no hay oportunidades visibles de crecimiento, entre otros. Esta situación puede llevar a un círculo vicioso, donde el ejecutivo continúe ocupando su puesto y al mismo tiempo dañando su imagen al no aportar el mismo valor y compromiso a la organización en la que trabaja.
En esta edición de 20 en empleabilidad, Fernando Miranda, Consultor Asociado de LHH DBM Perú comparte algunas recomendaciones, tanto para el colaborador como para la organización, para abordar este círculo vicioso.
Establecer canales de diálogo entre el colaborador y la empresa, buscar proactivamente otras oportunidades dentro de la organización son algunas de las recomendaciones que brinda al colaborador.
Desde la perspectiva de la empresa, aconsejó considerar la reubicación del colaborador en una posición más adecuada o, en última instancia, abordar una desvinculación de manera responsable y respetuosa.
LEA TAMBIÉN: Cuatro acciones para un exitoso cambio de empleo
LEA TAMBIÉN: Claves para tener éxito en una entrevista de trabajo