Bruselas (Reuters).- Los ministros de la zona euro luchaban el martes por calmar a los mercados financieros debido a que el optimismo por un paquete de ayuda para España, que busca estabilizar el bloque monetario, era desafiado por una audiencia en Alemania sobre la legalidad de las herramientas para combatir la crisis.
Los ministros acordaron en la madrugada del martes subvencionar a Madrid un año más hasta el 2014 para que el país ibérico alcance sus objetivos de reducción del déficit, a cambio de ahorros presupuestarios.
Igualmente, se establecieron los parámetros de un paquete de ayuda para los debilitados bancos españoles.
Las decisiones buscan prevenir que la cuarta mayor economía de la zona monetaria, sumida en una recesión cada vez mayor, necesite un rescate estatal completo, que equivaldría a forzar los límites de los fondos de rescate de Europa y sumergir más profundamente al bloque en una crisis de deuda.
"Aquí no hay una emergencia, hay un camino claro hacia la estabilización", dijo el ministro de Finanzas de Luxemburgo, Luc Frieden, sobre las medidas acordadas para España. "Los mercados tienen que darse cuenta de que el dinero está ahí, más dinero del necesario", agregó.
Pero los mercados se sintieron decepcionados de que la reunión no ofreciera más. El euro inicialmente operó cerca de un mínimo de dos años frente al dólar y tocó un mínimo de cinco semanas frente al yen, luego de que la atención se desplazara a una audiencia que se lleva a cabo en una corte alemana.
El máximo tribunal alemán abordará el martes el tema sobre si el nuevo fondo de rescate europeo y las normas presupuestarias son compatibles con la legislación nacional, en un proceso que puede influir no sólo en cómo enfrentar la crisis de la zona euro, sino también en hasta dónde puede llegar una mayor integración en el bloque.
La audiencia puede indicar cuánto tiempo tendrá el tribunal a Europa en vilo.
Algo más que un par de semanas significaría un grave retraso en la aplicación del Mecanismo Europeo de Estabilidad (MEDE), que ya fue aplazado del 1 de julio, y plantearía serias dudas sobre si Europa realmente tendrá los recursos adicionales que necesita para combatir la crisis.
"Un aplazamiento considerable del MEDE, que estaba previstopara julio de este año, podría causar una considerable incertidumbre sobre los mercados fuera de Alemania y una considerable pérdida de confianza en la capacidad de la zona euro para tomar las decisiones necesarias en un plazo adecuado", dijo el ministro de Finanzas alemán, Wolfgang Schaeuble, a la corte.