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Nueva York/Londres (Reuters).- El cobre subió por cuarta sesión consecutiva y alcanzó un máximo en tres semanas impulsado por la debilidad del dólar y las crecientes señales de suministros ajustados.
El metal escaló por segunda semana seguida, con los precios manteniéndose por encima de un promedio móvil de 200 días por segundo día, lo que sugiere una mayor tendencia al alza en la semana que viene pese a los problemas de deuda y los temores por el crecimiento económico en China. En la víspera, el metal perdió casi un 2%.
El cobre referencial en la Bolsa de Metales de Londres (LME, por sus siglas en inglés) no se comercializó al cierre pero recibió como última oferta 8,415 dólares la tonelada, un alza de más de un 1% desde los 8,322 dólares del jueves.
En Nueva York, el cobre para julio subió 5.15 centavos, a 3.8250 dólares por libra, en operaciones entre 3.7545 y 3.8305 dólares, otro máximo de tres semanas.
Las existencias del metal en Europa, Estados Unidos y Asia han estado bajando a medida que se envía a China, el mayor consumidor, donde de todos modos se acumula en los depósitos porque la demanda sigue estancada.
Los "warrants" cancelados, que es el metal que está asignado para entrega, se ubicaron en el 39.5% del total de las existencias.
En Shanghái, los inventarios de cobre disminuyeron al mínimo desde febrero, a 204,762 toneladas. "Lo que estamos viendo en las existencias (de cobre) es positivo para los precios", dijo Andrey Kryuchenkov, analista de VTB Capital.
El metal fue apuntalado, además, por el descenso del dólar a mínimos de varias semanas contra el euro y otras monedas, después de conocerse unos datos del crecimiento de Estados Unidos que resultaron más flojos de lo anticipado.
El crecimiento económico de Estados Unidos se enfrió en el primer trimestre, lo que elevó las expectativas de una nueva ronda de estímulo monetario por parte de la Reserva Federal. Cuando el dólar baja, las materias primas denominadas en esa unidad se tornan más baratas para los tenedores de otras divisas.
Las preocupaciones sobre la crisis de deuda en Europa mantuvieron controladas las ganancias, por una reducción de la calificación de crédito de España por parte de Standard & Poor's.