D&D: El Coworking tiene asegurado un aumento en la demanda para los próximos años

El Perú está experimentando una evolución natural en su mercado de espacios compartidos, o coworking, y en la medida que el rubro crece, se van abriendo diferentes nichos para las diversas especialidades pero ¿se mantendrá ese crecimiento?

Según Olenka Marquina, fundadora de D&D Coworking, el Peru es un país emergente y con tasas de crecimiento altas en comparación de sus vecinos, lo cual es un primer ingrediente que necesita el mercado del coworking.

“A esto se suma que aún queda una brecha muy grande de formalización de negocios, y que hay toda una nueva generación con educación de nivel y con mucha cultura de emprendimiento. Todos esos factores hacen pensar que sólo estamos viendo la punta del iceberg y que la demanda seguirá incrementándose en los siguientes años”, refirió.

En diálogo con Gestion.pe, mencionó que D&D pretende complementar la oferta de espacios de coworking en el Perú y que está hecho a medida para la industria de los arquitectos, diseñadores y creativos.

“Al contar con alianzas estratégicas de más de 15 marcas, se puede poner a disposición del coworker una gran cantidad capacitaciones sobre los distintos materiales así como también muestras físicas que son de extrema utilidad al momento de interactuar con sus clientes”, anotó.

Adicionalmente, mencionó que la empresa cuenta con el equipamiento necesario para esas especialidades, como plotters y a un directorio de proveedores y contratistas.

Entre los beneficios que ofrece el coworking figura que el minimizar los costos en comparación con las oficinas de uso exclusivo. Adicionalmente, la posibilidad de generar networking y sinergias son un elemento importante para decidir establecerse en un espacio compartido.

“El día de hoy, los coworkings como D&D van más allá de los elementos tradicionales como tener café de especialidad gratuito o elementos de librería a disposición, impresiones de planos gratis y va más allá, brindado contactos, muestras y también capacitaciones de grandes marcas”, puntualiza Marquina.

Sin embargo, considera que la competencia es dura y por eso apuestan por tener costos que son 20% más bajo que la competencia.

“Existen planes mensuales y semanales, así como planes diarios desde S/ 50 los cuales permiten al coworker plena flexibilidad en sus tiempos de trabajo. Igualmente la variedad de salas de reuniones, y salas de capacitaciones con diferentes características y equipamientos, marcan la diferencia de la competencia ofreciendo diferentes opciones para cada necesidad”, precisó.

La especialista señaló que el futuro del coworking vislumbra la creación de nuevos estilos, tal como sucede en Norteamérica, donde existen una gran cantidad de nichos.

“Hoy podemos ver espacios compartidos entre abogados o tal vez coworkings orientados al rubro gastronómico. Poco a poco los nichos irán apareciendo en Perú”, anotó.

Otra tendencia importante en el extranjero es que ya no solamente los coworkings sean pensados para el emprendedor sino también para aquellas grandes empresas que busca ganar tiempo en abrir una oficina nueva.

En el Perú, los profesionales que apelan más a este concepto son principalmente los emprendedores que han optado por un negocio propio y buscan generar eficiencias en costos.

“La idea del coworking es poder brindar todas las facilidades para que el profesional o emprendedor pueda enfocarse en su negocio y dejar de lado las preocupaciones de costo y mantenimiento de una oficina completa”, indicó.