Los vuelos a través de medio planeta van a ser aún menos cómodos de lo esperado. Eso si los servicios maratonianos de Sídney a Londres, de 20 horas y sin escala, llegan a despegar.
Qantas Airways Ltd. ha descartado la idea de introducir literas, camas, un gimnasio e incluso una guardería para pasajeros del vuelo comercial más largo del mundo. En su lugar, se les dará espacio para estirar las piernas y beber agua, dijo el máximo responsable de Qantas, Alan Joyce, el lunes en Seúl.
Los niveles de comodidad más espartanos ponen de relieve el reto al que se enfrenta Qantas a medida que trata de romper lo que llama la última frontera de la aviación. También hay otras barreras: si bien Joyce dijo que los aviones propuestos por Boeing Co. y Airbus SE para los vuelos de recorrido ultralargo pueden cubrir la distancia, las aeronaves no pueden llevar el peso que Qantas quería inicialmente.
En declaraciones a los medios en Seúl en la reunión anual de responsables de aerolíneas, Joyce dijo que aún necesita que los pilotos de Qantas acepten las largas horas de trabajo que conllevarán los vuelos ultralargos.
"Hay una gran cantidad de obstáculos que superar, pero creemos que podemos hacer que funcione", dijo. "Todavía no hay carga útil completa en cada aeronave, pero creemos que es suficiente para que sea comercialmente viable si las otras partes del argumento comercial funcionan".
Fecha límite
Qantas espera recibir las propuestas finales de aviones de Boeing y Airbus para agosto. Éstas incluirán el precio del avión, así como las garantías de eficiencia de combustible, costes de mantenimiento y fiabilidad. Joyce dijo que presentará los pedidos a los aviones para finales de año si decide seguir adelante con los vuelos, que se conocen en Qantas como proyecto Sunrise.
Qantas ha dicho que está evaluando el Airbus A350 de largo alcance frente al 777X de Boeing. Boeing o Airbus entregarían el avión en el 2022 y los primeros vuelos comenzarían en el 2023, dijo.
Aun así, hay poco margen para el error. Por ejemplo, el servicio Sídney-Londres no podrá transportar carga adicional, manifestó Joyce. Los vuelos directos a Nueva York desde Sídney son más factibles, agregó.
Qantas está tratando de desplegar una red de servicios directos súper largos que conectan la costa este de Australia con América del Sur, Sudáfrica y América del Norte, a medida que los crecientes precios del petróleo reducen los márgenes de ganancias.
Incluso después de promocionar proyecto Sunrise durante años, Joyce dijo que sería implacable. "Cancelaremos el proyecto" si los números no encajan, dijo y aclaró que los aviones tendrán secciones para pasajeros de primera clase, de negocios, de tarifa económica premium y de economía.