Si el 2020 se tornó complejo para el sector de textil confecciones en el país, el 2021 podría empezar a verse una mejora, aunque no para todos los actores del rubro, ya que la incertidumbre sigue persiguiéndolos.
La idea, dice Juan José Córdova, gerente general de Textil del Valle, es que el sector recupere los niveles del 2019 durante este año. Cabe indicar que en 2020, según la empresa, las ventas descendieron 25%, aunque la cifra pudo ser peor, pues se estimaba una caída de entre 40% y 50%.
“Mientras no haya un mayor apoyo al sector de manera conjunta entre Estado y empresa privada consideramos que el crecimiento en el sector será más vegetativo, pese a que se tiene la oportunidad de generar 2,000 puestos de trabajo si las condiciones laborales y tributarias fueran como la de los países con los que se compite”, anotó.
Transformación
La transformación será clave este año, dice el ejecutivo. Esta irá hacia el desarrollo de nuevos nichos de mercado en base a prendas sostenibles con la utilización de productos reciclados que puede ser algodón o polyester o productos orgánicos o cambios en los procesos.
Cabe precisar que para este 2021, el plan de la Asociación de Exportadores Perú Textiles es hacer una inversión como gremio con una planta de polyester que ayudaría a mejorar su competitividad en el mercado internacional, como también con el algodón, teniendo en cuenta que como país tenemos ventajas competitivas y arancelarias para ser proveedor de fibras artificiales como el polyester y el nylon.
Mercados
A nivel de la demanda, fuera del tema del Covid-19, Estados Unidos sigue siendo el mercado principal de las ventas ya que recibe el 70% de los envíos peruanos.
“Ciudades como Nueva York, Los Ángeles se vieron afectadas por el turismo, y por ende por la compra de prendas de los turistas, se han cerrado las tiendas, aunque en paralelo salió el tema online. Lo que esperamos es que la venta e-commerce se mantenga, y que este año entremos poco a poco a la normalización”, comentó.
Ahora bien, otro factor es la competencia, la que viene principalmente del mercado asiático. Sin embargo, para Juan José Córdova el mercado es tan grande para la oferta del sector textil peruano que si las empresas se enfocan a un nicho como los millennials, se podría triplicar la oferta.
Tema pendiente
Pero hay otra percepción sobre lo que podría darse este año. Boris Schwartzman, gerente de Comercialización de Compañía Textil Nuevo Mundo, señala que las salvaguardas han sido en 2020 y serán este año un tema pendiente para el sector.
“Indecopi no abrió investigación para la salvaguardas en la parte de textiles, solo para prendas. Se han mostrado los números, se trabajó con Produce pero indicaron que no ameritaba hacerlo, perjudicando a una de las industrias más importantes”, comentó el ejecutivo.
En su opinión, si se llega a poner salvaguardas a las empresas este año para las prendas, lo que pasará es que los grandes importadores de tela aumentarán sus compras ya que se harán más prendas en el país siendo los perjudicados los fabricantes de telas nacionales, anotó.
“Eso de alguna manera frenó lo que empezó a ser una recuperación, ya que el pronunciamiento de Indecopi (sobre las salvaguardas) fue entre octubre y noviembre pasado. Las cifras de venta se fueron duplicando de julio a agosto y de agosto a setiembre, y después esa tendencia de casi duplicarse se frenó cuando salió la información de la salvaguarda”, sostuvo Schwartzman.
Sin embargo, dijo, las importaciones de los grandes compradores de tela en Perú se dispararon en noviembre. “Esa será la tendencia este año”, acotó.
Cifras y datos
Impacto. Textil fue uno de los sectores más golpeados en lo que se refiere a manufactura en 2020.
Planes alternativos. No consideran que sea fácil este año ya que lo ideal sería alcanzar el 100% de la capacidad instalada, lo cual ven difícil.
Meta. En 2023 se estima que se consuma 100% de energías renovables y se espera que a mediados de este año seamos un sector carbono neutral, con el fin de ser sostenibles, dice Juan José Córdova.