Las esperanzas de más espacio para las piernas en las cabinas de los aviones cada vez más estrechas se desvanecieron luego de que los reguladores estadounidenses, en respuesta a una orden judicial, dijeran que no encontraron la necesidad de imponer nuevas normas a las aerolíneas.
La Administración Federal de Aviación (FAA, por sus siglas en inglés), en una carta fechada el lunes, dijo que la agencia "no tiene evidencia de que haya un problema de seguridad inmediato que requiera una reformulación de normas en este momento".
La investigación muestra que los espacios más estrechos en los aviones no es lo que ralentiza las evacuaciones de emergencia, escribió la FAA en su respuesta a Flyers Rights, el grupo de ciudadanos sin fines de lucro que presentó la demanda alegando que las evacuaciones podrían verse obstaculizadas por la estrechez de los asientos. En lugar de eso, las puertas de salida son los puntos de obstrucción que ralentizan las evacuaciones, escribió la agencia.
La medida de la FAA es la más reciente en una controversia que ha provocado inquietud entre los consumidores y ha provocado intentos de legislación por parte de miembros del Congreso.
Los nuevos asientos más angostos han permitido a las aerolíneas introducir filas adicionales en los aviones, lo que llevó a Flyers Rights a demandar a la FAA, alegando que estaba creando un peligro para la seguridad.
La jueza Patricia Ann Millett, en nombre de un panel de tres jueces, falló parcialmente a favor del grupo en julio de 2017.
"Este es el caso del increíblemente diminuto asiento de avión", escribió Millett en su fallo del año pasado. "Como muchos sin duda han notado, los asientos de los aviones y el espacio entre ellos se han vuelto cada vez más pequeños, mientras que los pasajeros estadounidenses han ido creciendo en tamaño".
La corte ordenó a la FAA llevar a cabo una "resolución adecuadamente fundamentada" de los problemas de seguridad relacionados con las configuraciones de los asientos. Se descubrió que la agencia había utilizado estudios "insatisfactorios" y "realización de pruebas no reveladas usando parámetros desconocidos" para justificar su rechazo inicial a revisar las normas. "Ese tipo de antecedentes volátiles no servirá", indicó el tribunal.
En su respuesta ordenada por la corte y el resumen de ocho páginas de los resultados de las pruebas de evacuación realizados por el especialista principal para supervivencia de cabina de la FAA, Jeffrey Gardlin, la agencia dijo que otros factores aparte del espaciamiento de los asientos son lo que ralentiza las evacuaciones.
En caso de emergencia, los auxiliares de vuelo primero deben dirigirse a las salidas, verificar el exterior antes de abrir las puertas de emergencia en caso de incendio y asegurarse de que los toboganes de emergencia se hayan inflado. Todos estos pasos toman tiempo, especialmente en el caso de una emergencia real, señaló la FAA.
Como resultado, es probable que los pasajeros esperen en las puertas, incluso cuando están hacinados en las configuraciones más apretadas con filas de asientos a solo 28 pulgadas de distancia, indicó la agencia.
"Esta cronología se ha demostrado reiteradamente durante las pruebas de evacuación", escribió la agencia. "La FAA no tiene evidencia de que un pasajero típico, incluso uno de tamaño grande, demore más de un par de segundos en levantarse de su asiento, o que ese lapso se acerque al tiempo necesario para tener las salidas de emergencia funcionando".
Como resultado del litigio, los fabricantes de aeronaves por primera vez han acordado que la FAA publique videos de sus pruebas de evacuación, que se consideran de propiedad exclusiva y no están sujetas a la ley de registros públicos.
Flyers Rights argumentó que el ancho promedio de los asientos se ha reducido desde aproximadamente 18.5 pulgadas (unos 46.9 centímetros) a principios de la década del 2000 a 17 pulgadas entre principios y mediados de la década del 2010. En las últimas décadas, la distancia entre las filas de asientos ha disminuido de un promedio de 35 pulgadas a 31 pulgadas, e incluso a 28 pulgadas en algunas aerolíneas, indicó el grupo en la demanda.
La combinación de menos espacio para las piernas y pasajeros más grandes había creado un peligro, argumentó Flyers Rights, dado que es más difícil salir de un avión en una emergencia y aumenta el riesgo de trombosis venosa profunda, condición potencialmente mortal de coágulos sanguíneos en las piernas que ha sido asociado con vuelos más largos.
El grupo no respondió de inmediato a una solicitud de comentarios por correo electrónico.