Más allá del Gas Natural Vehicular (GNV) y de los porcentajes de etanol en la gasolina (7.8%) y de biodiesel en el diesel (5%), los consumidores en el Perú no contamos con más alternativas de combustibles amigables con el medio ambiente de dónde elegir, advirtió el presidente de la Asociación de Consumidores Elegir, Carlos Zúñiga.

“Vas a cualquier grifo y no encuentras ni un gasohol que pueda ser considerado más ecoamigable que los demás combustibles por sus menores emisiones de gases de efecto invernadero”, indicó.

Agregó que si bien el gobierno va a promover el uso del gas natural licuado (GNL) para camiones y aparecen en agenda los autos eléctricos, no se puede esperar hasta que se monten redes de abastecimiento de estas alternativas.

Indicó que desde hace diez años se vienen dando diversos esfuerzos para masificar el uso del GNV, que emite 34% menos dióxido de carbono que las gasolinas convencionales, pero solo el 5% aproximadamente de autos que circulan en el país (250,000) utilizan este combustible.

“Explica, en parte, esta pobre adopción la falta de oferta de puntos de abastecimiento, que supera por poco las 300 estaciones”, dijo.

Sobre el etanol, que tiene niveles de emisión de CO2 potencialmente similares a los de GNV y es más económico que los derivados de petróleo, Zúñiga mencionó que esta opción también es una oportunidad desperdiciada.

“Por un lado, el etanol que utilizamos es derivado del maíz (de mayores emisiones de CO2 respecto al elaborado con caña de azúcar); por el otro, la Norma Técnica Peruana restringe el contenido de etanol en gasoholes a 7.8% como máximo”, señaló.

Precisó que dicho límite de 7.8% es inferior al establecido en otros países de la región como Colombia, y muy por debajo de Brasil y Estados Unidos, donde optativamente se utiliza gasolina mezclada con 30% y 85% de etanol.

¿Qué medidas hacen falta para que se use más GNV y etanol?, pues Zúñiga propone que el Estado de la mano con privados replanteen su estrategia de comunicación alrededor de la adopción de sistemas GNV, estimulando también la disponibilidad de puntos de abastecimiento para que sea una alternativa viable.

Además, se debe modificar la norma técnica para elevar el límite superior de etanol de gasoholes al menos al 10%, pero propiciando el uso de etanol de mayor calidad (caña de azúcar en vez de maíz).

Según el especialista, solo así podemos garantizar que las elecciones más ecoamigables de los consumidores representen realmente un impacto positivo en el corto plazo.

“Más allá del GNV y el etanol, los consumidores que pensamos en el planeta no tenemos más opciones de combustibles ecoamigables, pese a que potencialmente podríamos contar con ellas. Por eso es que invitamos al gobierno a reflexionar sobre qué puede hacer ya para mejorar esa oferta e incluir este tema tan trasversal a nosotros como son los combustibles dentro de las políticas para el cuidado de nuestro entorno” concluyó.

DATO
La contaminación del aire en Lima es generada por un 70% del parque automotor y la calidad de los combustibles, según estudios realizados por el Comité de Gestión de la Iniciativa de Aire Limpio, que integran diversos ministerios.