Pedro Castillo
Pedro Castillo

Manuel Romero Caro

1) El Presidente es el Jefe Supremo de las Fuerzas Armadas y Policía Nacional. Nombra al Ministro de Defensa y al del Interior. El Presidente y estos Ministros designan a los Comandantes Generales de las 3 ramas de las Fuerzas Armadas y de la Policía. Es usual que el Presidente entrante reemplace a todos los Comandantes Generales.

Entre julio y diciembre se decidirán los ascensos. Castillo puede influenciar el resultado y modificar el balance del poder interno. Los militares y policías de cualquier rango están subordinados al Presidente. Como toda institución vertical hay facciones para encaramarse en la cúpula.

El Presidente puede decidir hacia dónde inclinar la balanza y obtener lealtades. Siempre ha habido militares y policías ambiciosos de poder dispuestos a seguir los deseos del Presidente para ascender en la estructura militar o policial. Vale decir, las Fuerzas Armadas y la Policía pueden convertirse legalmente en instrumentos de Pedro Castillo.

2) Castillo no necesariamente tiene que seguir las formalidades legales. No requiere buscar aprobación del Congreso para introducir cambios sustantivos. Puede organizar muchos colectivos a nivel nacional. En todo el país hay escuelas y colegios públicos con maestros que constituyen una estructura organizada y que han constituido el principal apoyo a Castillo en estas elecciones.

En el año 2017 Castillo lideró exitosamente estas bases y condujo la huelga magisterial más prolongada de la historia peruana que puso de rodillas al Gobierno de Kuczynski. Con estas bases pueden multiplicarse comités y asambleas populares en todo el Perú y montar una estructura nacional de poder paralela a la constitucional. Esta estructura puede tomar decisiones y organizar una agitación nacional que, por razones de no violencia y derechos humanos, no sería reprimida por militares ni policías sometidos a Castillo y sus Ministros. El poder popular puede ser muy grave pues si logra consolidarse y se vuelve delincuencial como en Venezuela seremos todos los que pagaremos las consecuencias.

En ese contexto el Congreso, el Tribunal Constitucional y la Constitución serían disueltos (por el poder popular sin necesidad de formalidad legal alguna).La disolución del Congreso y la eliminación del Tribunal Constitucional son parte explícita del discurso de Castillo. Asimismo, la convocatoria a una Asamblea Constitucional Popular.