Christian Lengua
Máncora, el destino peruano preferido por los turistas nacionales y extranjeros amantes del sol y la playa, se prepara para enfrentar una nueva realidad en la próxima temporada de verano como consecuencia de la pandemia del COVID-19.
Tras la cuarentena en marzo, los hoteles tuvieron que cerrar, y recién en junio la mayoría pudo volver a operar. Carlos Canales, presidente de la Cámara Nacional de Turismo (Canatur) señaló que, como en todo el sector, la situación es compleja en las playas de Máncora y Punta Sal, por el poco flujo de turistas.
Esto, en gran medida, porque son destinos para los niveles socioeconómicos medio y alto peruanos, que tienen un gasto promedio de más de US$ 100 por día.
Actualmente hay unos tres vuelos diarios de Lima a Piura y un vuelo diario a Talara. “Esto hace que Máncora tenga una pequeña oferta, deben sentirse privilegiados porque bajaron los contagios, el clima ayuda y hay una demanda de las pocas personas que quieren aventurarse a ir al norte del país”, explicó.
Según datos de la Cámara de Comercio de Piura, antes de la pandemia recibían 15 vuelos diarios y el 30% de los pasajeros era por turismo, sobre todo de playa, y el 70% ejecutivos. Ahora, el turismo es básicamente regional.
“Ahora mismo estamos en control de daños, hay un 25% de negocios en Piura que no está recuperado y entre estos está la hotelería”, señaló Javier Bereche, presidente de la Cámara de Comercio de Piura.
Calcula que, en promedio, los hoteles trabajan con un 20% de su tasa de ocupabilidad. ¿Habrá temporada alta? Los meses más fuertes son enero, febrero y marzo, y para esta temporada se preparan la mayoría de hoteles.
Es el caso del hospedaje Espada Máncora, que habilitó un nuevo pabellón con seis habitaciones grandes y una piscina de 154 m2 a inicios de año, de 20 habitaciones que normalmente tenían ocupadas, actualmente solo operan con siete por temas de protocolo y seguridad. Además, trabajan con personal reducido.
“Generalmente venían muchos turistas ecuatorianos que gastaban entre US$ 20 y US$ 30 por día por persona. Los que vienen ahora son de Sullana, Piura y Chiclayo. De Lima vienen muy pocos”, comentó Gianmarco Maceda, administrador del hospedaje, que volvió a abrir sus puertas hace una semana.
Confía en que el próximo año las personas comiencen a viajar. Es más, relata que actualmente reciben muchas llamadas de sus clientes habituales en los meses de enero y febrero. ¿Será posible operar al 100% para el inicio del próximo año? “No creo que podamos ocupar todo el hotel. Para fin de año será un 50%, pero eso sirve para dar trabajo a mucha gente”, señaló.
Avistamiento de ballenas
Para el titular de la Cámara de Comercio de Piura, hay una gran oportunidad para potenciar los balnearios en el segundo semestre del presente año al llegar la temporada de avistamiento de ballenas a pocos metros del litoral.
Precisamente, Canatur y Promperú alistan una campaña para promover el turismo interno en las playas de norte, y en el oriente peruano, con precios reducidos y con el objetivo que la mayor cantidad de peruanos se movilice para fin de año, así como en enero y febrero.
“Se va a ofrecer, además de paquetes en cadenas hoteleras, la venta de servicios como excursiones, nadar con tortugas (en el Ñuro) y avistamiento de ballenas”, manifestó Canales.
Por su lado, la Cámara de Comercio de Piura impulsa la campaña Cómprale a Piura para seguir incentivando el turismo regional. Sobre todo, teniendo en cuenta que hay medidas que no permiten operar con normalidad, como la inmovilización obligatoria de los domingos.
Precios para competir
Canales enfatizó que es importante que los empresarios de las playas del norte busquen un equilibrio en sus precios para atraer a los turistas nacionales, porque sus tarifas son una barrera para que tengan más ocupabilidad.
“Por ejemplo, hoy en día en Cancún los complejos hoteleros han bajado sus precios a un promedio de US$ 30, US$ 40 o US$ 50 por noche. Antes de tener vacíos los hoteles, decidieron bajar sus precios y han tenido un efecto importante en su turismo interno”, subrayó Canales.
El administrador de Espada Máncora comentó que normalmente tenían un precio de entre S/ 70 y S/ 90 por persona por noche, de acuerdo con el número de personas y su estadía. Ahora, la tarifa es de S/ 60 por persona por noche, incluido desayuno.