El buscar salir lo menos de cosa y evitar aglomeraciones ha llevado a muchos usuarios a usar el canal online para sus actividades, entre ellas, las operaciones bancarias.
Un estudio realizado por los alumnos de la carrera de Marketing – Facultad de Ciencias Empresariales de la Universidad San Ignacio de Loyola (USIL), enfocado en los clientes de los bancos con respecto al uso del Mobile Banking o Banca Móvil, muestra que los hábitos han cambiado antes y después de la cuarentena por el COVID-19 y en medio de la nueva normalidad.
Así, tras concluir la cuarentena, el 62 % de los encuestados afirma que aumentará sus hábitos acerca de la banca móvil, y el 35 % indica que no puede precisar si aumentará o no. También se ve un cambio de comportamiento en la frecuencia de uso del mobile bank, desde que empezó la cuarentena ya que el 57% de los encuestados mencionó que su uso ha aumentado, y el 35 % afirma que se mantiene.
Pero en el caso de los encuestados que no utilizan la banca móvil, el 80 % indica que es porque tienen miedo de que les roben dinero de sus propias cuentas bancarias, por lo que se concluye que el principal motivo es la inseguridad que perciben de este servicio para realizar sus operaciones bancarias.
Y la razón principal por la que realizan sus operaciones mediante la banca móvil es por el ahorro de tiempo al utilizar el servicio (83%), seguido de un 59% que indica que lo emplea porque puede ingresar a cualquier hora y cualquier día de la semana y un 43% porque puede realizar varias operaciones a la vez.
El ahorro de tiempo es más valorado por los vecinos de Lima Sur (94%) y en esta zona también destaca en la opción de la experiencia de utilizar la banca móvil es más agradable que ir a la oficina, con un 44%.
Operaciones más realizadas
Y las tres actividades realizadas con mayor frecuencia a través de la banca móvil son el pago de servicios (64 %), las transferencias a terceros (61 %) y consultas de saldos (51 %). Asimismo, el 83 % de los entrevistados indica haber tenido experiencias muy buenas (32 %) y buenas (51 %) al realizar sus operaciones bancarias.
En base a ello, el 91 % de los entrevistados indica que recomendaría el uso de la banca móvil a sus amistades, familiares o colegas, mientras que un 93 % indicó que considera importante y muy importante que un banco cuente con servicio de banca móvil.
Si hablamos de edades, las personas mayores de 27 años que pagan sus servicios mediante la banca móvil representan el 79%, y las personas entre 22 y 26 años que realizan el mismo pago representa el 62%. Los menores de 22 años son el 53%.
Y en cuanto a nivel socioeconómico y su experiencia el 24 % del NSE C califica su experiencia utilizando la banca móvil al momento de realizar sus operaciones o transacciones como muy buena. Por otro lado, dentro del NSE A, el 2% califica su experiencia como regular.