Más unidos que nunca. Donald Trump bromeó que “no puede deshacerse” del controvertido multimillonario Elon Musk, quien se ha vuelto muy cercano al electo mandatario estadounidense y ha sido un pilar en su exitosa campaña.
Las declaraciones las dio el pasado 13 de noviembre en una conferencia del Partido Republicano, donde Trump y Musk volaron juntos desde Florida y aterrizaron en la Base Conjunta Andrews, cerca del Capitolio. La reunión precedió a un encuentro en la Casa Blanca con el presidente Joe Biden.
“Elon Musk y el presidente Trump son aliados fuertes y líderes visionarios, comprometidos con la misión de hacer que Estados Unidos vuelva a ser grande. La perspicacia empresarial única de Musk lo convierte en un líder único en su generación, y sus ideas innovadoras y su eficiencia beneficiarán enormemente a nuestro gobierno federal”, señala una declaración que la portavoz de la transición Trump-Vance, Karoline Leavitt, envió por correo electrónico a Newsweek. La creciente influencia de Musk ha sorprendido al “mundo Trump”, debido a que el Ceo de Tesla y SpaceX, no solo se ha involucrado en la política, sino también en su vida personal.
LA BROMA PESADA QUE LE HIZO TRUMP A ELONK MUSK
Donald Trump ha añadido un nuevo toque humorístico a su relación con Elon Musk, quien ha sido declarado copresidente del recién creado Departamento de Eficiencia Gubernamental junto al ex candidato presidencial Vivek Ramaswamy.
Trump destacó la influencia del CEO de Tesla y SpaceX en su campaña y su papel creciente en su equipo de transición, al punto de bromear que “no puede deshacerse de él”, lo que refleja tanto la influencia de Musk como la relación entre ambos líderes.
“Elon no se irá a casa. No puedo deshacerme de él, al menos hasta que no me guste”, bromeó Trump, el pasado miércoles 13 de noviembre, ante los líderes republicanos de la Cámara de Representantes en un hotel de Washington.
Huésped
La influencia de Musk en el círculo de Trump no ha pasado desapercibida. Desde la victoria electoral, el magnate ha acompañado al presidente electo en su residencia en Mar-a-Lago, donde incluso se alojó junto a su hijo X. Durante su estancia, Musk no solo disfrutó de actividades como el golf y sesiones fotográficas, sino que también se ha unido a llamadas con líderes extranjeros, entre ellos el presidente turco Recep Tayyip Erdogan y el presidente ucraniano Volodymyr Zelensky. Esto ha llevado a que varios observadores de la política estadounidense cuestionen el grado de acceso y la informalidad de la participación de Musk en estos asuntos.
¿CÓMO VEN LOS REPUBLICANOS LA CERCANÍA DE TRUMP CON MUSK?
Para la veterana periodista Kara Swisher, la cercanía de Musk con Trump es confusa y desconcertante para muchos dentro del equipo republicano. Swisher señaló que Musk tiene un estilo de “meterse todo el tiempo” y que su presencia constante lo convierte en un “invitado que no quiere irse”.
Incluso, algunos cercanos a Trump han expresado su sorpresa ante la aparente familiaridad de Musk con los entornos del presidente electo, lo que incluye reuniones de alto nivel y eventos familiares. Esto ha intensificado las especulaciones sobre el papel que Musk podría desempeñar en la administración Trump, más allá de su título humorístico de “copresidente”.
“Se está comportando como si fuera copresidente y se está asegurando de que todos lo sepan”, dijo una de las fuentes a NBC News.
Informes recientes de NBC News y The New York Times sugieren que el multimillonario ha llegado incluso a alardear de su papel en el triunfo de Trump, mencionando su apoyo a través de plataformas como America PAC y X. Según fuentes cercanas, Musk parece estar interesado en que Trump se sienta en deuda por su contribución a la victoria presidencial, aunque esta relación también ha generado una mezcla de admiración y recelo en el entorno republicano.