La ciudad de Nueva York ha acordado pagar US$92,5 millones para resolver una demanda colectiva de más de 20,000 inmigrantes que fueron víctimas de una detención indebida entre 1997 y 2012. Este acuerdo histórico, pone fin a una batalla legal de más de una década. Conoce los detalles.
Los inmigrantes que eran detenidos permanecían en prisión durante días, semanas e incluso varios meses después de las fechas de liberación programadas, después de recibir solicitudes emitidas por parte del Servicio de Inmigración y Control de Aduanas de Estados Unidos (ICE, por sus siglas en inglés) al Departamento de Correcciones de Nueva York.
La ciudad de Nueva York deberá pagar una demanda US$92,5 millones para resolver una demanda colectiva de más de 20,000 inmigrantes que fueron detenidos de manera indebida entre 1997 y 2012. Este caso comenzó en 2010 con la demanda de Oscar Onadia, quien fue detenido 41 días más allá de su sentencia de cinco días por conducir sin licencia.
Aunque Onadia falleció a principios de este año, su esposa recibirá US$25,000 como parte del acuerdo. Pese a aceptar el pago de US$92.5 millones, la ciudad de Nueva York ha negado toda responsabilidad en los hechos. Este fondo cubrirá las compensaciones para los afectados, así como los costos legales asociados.
“Las órdenes de detención imponen un doble castigo a los inmigrantes, obligándolos a ingresar al sistema de detención del ICE después de cumplir sus condenas”, señala el comunicado oficial de los demandantes. Este acuerdo subraya la importancia de garantizar los derechos de todos los residentes, independientemente de su estatus migratorio, en un sistema que busca justicia para todos.
Entre 1997 y 2012, más de 20,000 inmigrantes fueron detenidos más allá de sus fechas de liberación programadas. La detención se produjo tras solicitudes del ICE para retener a estos individuos hasta 48 horas adicionales con el fin de iniciar el proceso de deportación. Estos retrasos resultaron en la acumulación de más de 166,000 días (454 años) de detención ilegal.
Frank Barker, un residente legal de Barbados que llegó a Estados Unidos a los nueve años, es uno de los rostros más representativos de este caso. En 2008, tras cumplir una condena de ocho meses en Rikers Island, Barker no fue liberado. En su lugar, fue retenido ilegalmente durante un año por órdenes del Servicio de Inmigración y Control de Aduanas (ICE).
“Como alguien que ha vivido con miedo al ICE y que perdió un año de su vida por ser detenido, aplaudo esta demanda y aliento a cualquier persona que haya experimentado un trato similar o que tenga un familiar o amigo que se haya visto afectado por esto, a que tome medidas para ser incluido en esta demanda colectiva”, aseguró Barker, quien es residente del Bronx, Nueva York, en el comunicado.
Los demandantes, ahora residentes en EE.UU. y otros países como México, República Dominicana y Cuba, recibirán compensaciones que podrían alcanzar decenas de miles de dólares, dependiendo de la duración y las circunstancias de su detención.
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