Dwayne Johnson es, probablemente, el mayor caso de éxito de un luchador de la WWE en otros ámbitos, convirtiéndose en el actor más rentable de Hollywood gracias a sus millonarias películas e iniciando gigantes proyectos deportivos, como presentador de televisión y accionista en cadenas relacionadas con diversas disciplinas.
En casi 25 años, el luchador de tercera generación consiguió éxito en el wrestling, donde se coronó como Campeón Mundial de la WWE y Peso Pesado en 7 oportunidades, para luego dar el salto al cine, un camino que otras leyendas del negocio como Triple H, Goldberg o Hulk Hogan intentaron sin éxito.
Con una carrera impresionante, el “Campeón del pueblo” inicia una nueva aventura como “The Rock”, pues además de hacerse con los derechos del nombre artístico, se hizo oficial su ingreso a TKO Group, la empresa que maneja tanto la WWE, líder del entretenimiento deportivo, como la UFC, la principal promotora de Artes marciales mixtas.
El 2024 arrancó de gran forma para Dwayne Johnson, no solo por su aparición en el primer “Monday Night Raw”, en el que causó sensación al protagonizar un segmento con Jinder Mahal y deslizar un enfrentamiento con su primo, el actual Campeón Mundial Roman Reigns, sino también porque ha conseguido dos importantes logros a nivel empresarial y de imagen.
El primero es que el actor se une a la junta directiva de TKO Group, el conglomerado que maneja WWE y UFC (Ultimate Fighting Championship); y el segundo es que ahora es propietario único de “The Rock”, su nombre artístico y que por varios años le perteneció a la empresa de Vince McMahon.
De hecho, ambos logros van de la mano. Al obtener los derechos de su nombre de luchador, que fue una marca registrada, también será imagen de la mercancía que vende la empresa de entretenimiento, y que consigue millones de dólares en ganancias cada año. Además, a nivel individual, Johnson podrá presentarse como The Rock cuantas veces quiera sin necesitar de la aprobación de la compañía de wrestling, con la que siempre tuvo buenas relaciones y nunca presentó inconvenientes con el uso de esta denominación.
“Estoy encantado de asociarme con Dwayne y dar la bienvenida a alguien con su inmenso talento a la junta directiva de TKO. Él aporta un historial increíble en la creación de contenido y la construcción de marcas de consumo reconocidas a nivel mundial, y desempeñará un papel clave en la realización de nuestras metas para TKO”, indicó Ariel Emanuel, director del conglomerado, durante la presentación de Johnson.
Durante casi tres décadas, Dwayne Johnson se hace llamar The Rock, un nombre que lo ha acompañado en su etapa como luchador y luego como actor y presentador de televisión. Y aunque el nombre hace referencia alguien duro como una piedra, lo cierto es que guarda un significado aún mayor.
Dwayne Johnson es un luchador de tercera generación, siendo su padre Rocky Johnson y su abuelo “Gran jefe” Peter Maivia, ambos exponentes del estilo samoano en el wrestling. De hecho, su papá fue el primer campeón de raza negra en WWF, cuando levantó los Campeonatos en Parejas con Tony Atlas.
En su debut, la empresa decidió hacer referencia a la historia familiar llamando a Dwayne como Rocky Maivia, combinación de su padre y abuelo. Pese a esto, el personaje era limitado en el micrófono y solo se encargaba de luchar, por lo que no conectaba con el público, poniendo en riesgo su carrera.
Sin embargo, en 1997, Johnson le dio un giro a su personaje, volviéndose más arrogante y desafiante, cambiando su nombre a “The Rock” y uniéndose a grupos como los supremacistas “Nation of domination” o “La corporación” al lado del jefe máximo, para luego cambiar a ser un héroe (Face, en la lucha libre) y escribir su historia como el primer campeón de raza negra y uno de los más importantes en el negocio.
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