La tarjeta de crédito es un instrumento financiero que otorga liquidez inmediata para el consumo de bienes y servicios, a la vez que extiende la posibilidad de pagarlos en mensualidades hacia el futuro.

Uno de los supuestos de la teoría económica en torno al tema del bienestar indica que una persona maximiza su bienestar si consume más y mejor en cada momento de su vida.

Sin embargo, existe el problema de que los flujos de ingresos que recibe una persona a lo largo de su vida no necesariamente corresponden a los momentos en los que es necesario consumir, de modo que el sistema financiero crea productos como las tarjetas de crédito y los fondos de inversión para empatar los periodos de ingreso y consumo de una persona.

Cuando una persona tiene ingresos superiores a sus necesidades, en ese momento es cuando ahorra o retrasa su consumo a fin de obtener un ingreso adicional por rendimientos, mientras que, cuando requiere de ingresos para consumir pero éstos son insuficientes, puede recurrir a los ahorros realizados o a la contratación de crédito, a cambio de pagar una tasa de interés.

Por lo anterior, una persona no puede mejorar su bienestar si no utiliza eficientemente los mecanismos de ahorro y crédito que tiene disponibles.

A continuación, se plantean las siguientes recomendaciones para mejorar en el uso de la tarjeta de crédito y el ahorro.

¿Cómo puede mejorar el uso de su tarjeta de crédito y ahorrar al mismo tiempo?

1. Reconozca las tasas de interés y de rendimiento que le ofrecen las tarjetas de crédito y el instrumento de ahorro donde deposita su dinero. Identifique si existen otras tarjetas u otros instrumentos de ahorro que le ofrezcan mejores condiciones.

2. Por regla general, siempre será mejor pagar una deuda que generar un ahorro. El primer paso para ahorrar es no tener deudas.

3. Crear historial crediticio es importante, porque podrá tener más líneas de crédito a su disposición.

4. Consulte siempre sus estados de cuenta. No sólo es el medio de contacto frecuente con su prestadora de servicios financieros (como su banco, aseguradora o afore), sino que lo pone al corriente de cambios operativos que pueden afectar sus condiciones de contratación de servicios.

5. Evalúe sus consumos. La correcta identificación de todos aquellos bienes y servicios que en realidad le reportarán mayor bienestar será fundamental para decidir si utilizar un crédito o recurrir a su ahorro para adquirirlo.

Para obtener mayor información sobre el sistema de pensiones, visite la página de Internet: www.amafore.org.

Diario El Economista de MéxicoRed Iberoamericana de Prensa Económica (RIPE)