Redacción Gestión

redaccion@gestion.pe

¿Cómo comienza 51-1? nace el 2006 un poco de casualidad. Yo venía de trabajar en Holanda y me encontré con mis compañeros de aulas Fernando Puente Arnao y César Becerra. Entonces nos juntamos para hacer el proyecto Multivacaciones, que está al frente de la iglesia Virgen del Pilar de San Isidro, era un encargo simple, pero que nos dio la oportunidad de experimentar. Ese proyecto tuvo mucha repercusión, sobre todo afuera.

¿Qué vino luego de hacer Multivacaciones?Tuvimos el encargo del , en los cerros de Camacho, donde nuevamente tuvimos un cliente que nos dejó innovar. En este proyecto casi todos los departamentos eran diferentes e ideamos un diseño antisísmico que además permitía que no se densificara mucho la zona.

¿Fue así que alcanzaron la madurez?Claro, se trataba de un proyecto de 35 mil metros cuadrados, algo que nos ayudó a madurar muy rápido, por lo cual abrimos una oficina, contratamos gente e invertimos para estar a la altura de los encargos.

¿La apertura de la oficina llegó con alguna sorpresa?Sí, porque justo empezamos una increíble relación con la inmobiliaria Shamrock, ellos venían de Florida y nosotros empezábamos ya a crecer. Primero hicimos dos proyectos pequeños y de ahí salió que acaba de terminarse.

¿Cómo es el cliente limeño?Lima es el laboratorio ideal para la arquitectura, es único en el mundo, por razones como que no llueve, no hace ni mucho calor ni mucho frío. Al mismo tiempo tiene un coste de construcción bajísimo.

¿Y el cliente acepta la innovación en el diseño? Sí , porque se trata de una sociedad muy abierta a la innovación (que por alguna razón nunca hemos encontrado en otras partes del mundo). Hemos tenido mucha suerte y podemos experimentar sin tanto temor. Por lo menos, un poco ese es el espectro que a nosotros como arquitectos nos ha interesado y en donde estamos operando, siempre empujando los límites para ver hasta dónde llegamos.

¿Qué significa este año para 51-1?Lo que va a empezar este año es la internacionalización de 51-1 con el Museo de Arte Moderno de Medellín que está a punto de empezar obras y con varios proyectos acá terminados. Perú tiene muchos ojos dirigidos hacia él y dentro de eso nosotros, con muchos arquitectos peruanos, empezamos a ser requeridos afuera.

¿Cómo van con el proyecto del Museo de Arte Moderno de Medellín?Acabamos de terminar todos los planos y pronto sale la licencia de construcción.

¿Qué sintieron cuando fueron seleccionados para este proyecto?Fue el concurso soñado. Muy jóvenes nos invitan a participar, competimos contra nuestros héroes de la arquitectura latinoamericana y mundial. Logramos ganar y ha sido nuestra gran catapulta internacional.

¿Cómo es el proyecto?El proyecto es muy jugado, muy innovador; y ahora que está todo avanzado, solo esperamos que terminen de completar el financiamiento.

¿Qué busca 51-1?Tenemos un gen adentro, de que cada proyecto lo tenemos que pensar de una manera diferente a lo normal. De que cada encargo establezca un vínculo con la sociedad, con la ciudad y trate de mejorarlas de alguna manera. 51-1 busca tener una diversidad muy grande de espectro a nivel socioeconómico y también a nivel de tipos de proyectos.

Supersudaca¿51-1 pertenece a una red de arquitectos?51-1 es parte de la red Supersudaca. Este movimiento nace en los años 2000-2002 cuando América Latina no tenía ninguna voz en el concierto mundial de arquitectura, todo era Europa, Norteamérica y Asia como fenómeno emergente. Entonces como llenando ese vacío nos encontramos varios arquitectos latinoamericanos en Holanda y creamos Supersudaca.

¿Cómo se expandió Supersudaca?Luego de que todos volvimos a nuestros países de origen, armamos varias bases de Supersudaca incorporando a otros nuevos miembros que hicieron mucho más fertil esta colaboración. Cada una de estas oficinas funcionan localmente, y de acuerdo a cada proyecto que se presente, nos unimos para estar a la altura de los requisitos.

¿De qué modo funciona cuando se unen? funciona como un Think Tank y a veces funciona como una multinacional. Como los power rangers que todos juntos arman un megazord, nosotros podemos armar una oficina que puede competir con los más grandes, porque tenemos diferentes capacidades y podemos aguantar un proyecto gigante.

¿Cuál es la filosofía de SuperSudaca?Quizás es una que suena a broma, pero es muy fuerte. Tenemos un interés, casi como Houdini, por liberarnos del cliché que la arquitectura latinoamericana está condenada a hacer casas de playa. Por eso tenemos el interés de buscar que la arquitectura intervenga en todos los ámbitos de la sociedad. A veces decimos que nos interesa cambiar el mundo con la arquitectura, pero también mucho nos interesa cambiar la arquitectura con el mundo, que éste nos afecte. El contexto de la sociedad en la que vivimos es muchas veces más importante para moldear un proyecto que los accidentes del terreno o ver por donde sale el sol.

HOJA DE VIDAEdad: 38 años.Estudios: Máster en Arquitectura, en el Instituto de Berlage (Holanda).Hobbie: Tenis.Estado civil: Casado.