Carlo Fidel, gerente general de Vanguardia Financiera.

En el Perú y son pocos los que logran crecer, sin embargo en ambos casos se afronta un problema similar: la falta de financiamiento, aunque muchas veces se debe a que no se sabe detectar el tipo de financiamiento que más le conviene.

Ante esta situación, Carlo Fidel, gerente general de Vanguardia Financiera, indicó que el primer paso es identificar la situación o ciclo de vida en el que se encuentra la empresa para luego establecer el tipo de financiamiento que requiere.

“Todas requieren financiamiento pero existen etapas por las cuales ellas (las empresas) pasan durante su ciclo de vida. Por ejemplo, está la etapa inicial donde una empresa empieza, se les conoce como startup y hay muchísimas de ese tipo; luego viene la fase de crecimiento cuando encuentran un mercado y un nicho”, precisó.

Agregó muchas veces el emprendedor busca capital que pueda ser otorgado por amigos y familiares pero desconocen que existen fondos de inversión que pueden invertir en los proyectos de las startup.

“En el caso de las empresas que Vanguardia Financiera normalmente asesora y financia, son aquellas que están en las siguientes etapas, aquellas que están en un crecimiento, que ya descubrieron un mercado y quieren seguir creciendo; y aquellas que entran en una etapa de consolidación", anotó.

Las empresas que ya tienen un mercado y están creciendo ya tienen acceso a fuentes de financiamiento tradicionales, como los bancos  u otras entidades del sistema financiero, aunque todavía existen "algunos huecos o vacíos".

"Normalmente los productos financieros del sistema bancario son productos hechos no para una sola empresa sino para un sector o varios grupos de empresarios, lo que le quita personalización al producto, servicio o solución que le entrega al empresario", comentó.

En diálogo con Gestion.pe, ​indicó que muchas veces el empresario acude al banco con una situación particular que el banco no puede atender individualmente, ya que eso sólo ocurre con las empresas grandes o corporativas.

"Pero a las empresas pequeñas o medianas no puede atenderlas de esa forma porque los costos terminan siendo muy altos para el banco", anotó.

Sin embargo, mencionó que las boutiques financieras buscan dar soluciones personalizadas a las empresas para que puedan acceder a fuentes de capital ajustadas a sus necesidades.

"Existen fuentes de capital privadas y públicas, en este último caso, desde hace cuatro años se está incentivando mucho lo que es el Mercado Alternativo de Valores (MAV) para la pequeña y mediana empresas", acotó.

Puntualizó que el MAV es una plataforma bastante importante para el empresario puesto que no es necesario que seas una empresa corporativa.

"Normalmente cuando un empresario escucha la palabra pues se imagina que tiene que ser una empresa gigantesca, sin embargo el MAV está abriendo la puerta a empresas pequeñas que pueden estar facturando desde S/ 2 millones anuales", añadió.

Aunque las empresas interesadas en ingresar al MAV deben tener sus estados financieros y la contabilidad ordenados, y así podrán acceder a fuentes de capital distintas a la del sistema bancario tradicional, según el especialista.

"De esta forma, el empresario se siente acompañado y que sus costos financieros no lo van a retener en su crecimiento sino que lo van a optimizar", dijo.

Ordenando la casa

Pero ¿es fácil ordenar 'la casa' de los estadios financieros y contables?, Fidel  señala que si las empresas tuvieran definido ingresar directamente al MAV entonces probablemente se verían ofuscados con la cantidad de cosas que se deben cambiar 'de la noche a la mañana'.

Sin embargo, afirmó que las empresas deben ir paso a paso en su proceso de adecuarse a las exigencias del MAV, lo cual podría demorar entre uno a dos años para una empresa que tiene desordenada su contabilidad o tiene retrasos bancarios.

"En esos casos se podría optar por buscar alguna alternativa de acceder a capital privado para ejecutar los proyectos de la empresa, mientras se sigue un proceso de ordenar sus estados financieros y la contabilidad poco a poco", precisó.

Recordó que no existen muchos requisitos para que una empresa ingrese al MAV pero se debe generar confianza en los inversionistas que potencialmente puedan apostar con capital para la empresa y eso implicar cumplir ciertos aspectos.

"Entre ellas están tener estados financieros auditados o una clasificación de riesgo. Estas cosas no son un problema, es más, tampoco su costo es tan elevado, sin embargo una empresa no puede saltar de la noche a la mañana a un auditor o a la empresa clasificadora de riesgo para que trabajen sobra algo que está en desorden", mencionó.

En ese sentido, proyectó que una empresa con sus estados financieros ordenados y auditados puede, tranquilamente, salir a buscar recursos en el MAV en un mes. 

"Los estados financieros de una empresa son como un CV de una persona que está buscando trabajo, y se requiere de una clasificación de riesgo, que es como buscar a una persona en Infocorp pero de una manera más extensa", resaltó

Durante el primer semestre del 2018, Vanguardia Financiera experimentó un crecimiento de 68%, en comparación con sus resultados del primer semestre del 2017.

La empresa se dedica a diseñar soluciones financieras, levantar
capitales privados y públicos para pymes y grandes empresas de diversas industrias y sectores. Sus clientes facturan entre S/.5 y más de S/ 200 millones anuales, se caracterizan por ser empresas familiares.