FOTO 2 | 2. Buscar el financiamiento equivocado. Comenzar un negocio requiere dinero, de lo contrario gastarás tiempo y esfuerzo inútilmente. Entre las múltiples opciones que existen para conseguir financiamiento algunas te serán útiles. Muchos emprendedores comienzan pidiendo dinero a sus familias y no siempre es la mejor opción, si quien te presta el dinero puede esperar para recuperarlo no hay problema. Pero es muy probable que se desespere mientras el negocio va tomando forma. Los bancos también ofrecen préstamos, pero no todos serán adecuados a tus necesidades, antes de firmar cualquier contrato revisa las tasas de interés, el periodo para liquidar la deuda, penalizaciones y los detalles que muchas veces olvidamos por la urgencia de dinero. Algo importante es que busques un crédito para empresas, si obtienes un préstamo personal estarás poniendo en riesgo tu propio historial crediticio. Actualmente existen otros mecanismos como el crowfunding, ¿hay alguien interesado en financiarte?, un chapuzón en la red te ayudará a descubrirlo.

Inclusión financiera. Los ingresaron al Perú dentro de un panorama de créditos que viene incrementando desde hace varios años.

Dentro de este aumento, Solven detectó que el 52% de los trabajadores del sistema, no tienen acceso a créditos de consumo y que el 40% de ellos, nunca ha tenido un crédito bancario. ¿Por qué?

Conversamos con Emilio Santisteban, country manager Perú de Solven, sobre los y la tasa de interés que tienen.
El sueldo promedio para adquirir un así es entre los S/ 1, 000 a 2,000, son jóvenes que si les dan crédito, tienen tasas por arriba del 100%.

“Lo que hacemos es desarticular ese nudo que tienen de acceso al crédito, dándoles tasas preferenciales, con una plataforma digital desarticulando el proceso operativo para que este se auto gestione."

Santisteban aseguró que el va desde los 12 meses hasta los 48 de plazo y la tasa de interés bordea entre 39 hasta 45% anual.

“En el mercado, la tasa promedio es de 45 a 50% pero llegan a tasas de 130 para los pobladores de la base de la pirámide. Ahí es nuestro diferencial.”

Mencionó también que el proceso es simple, simplemente se firma un convenio con la empresa, el colaborador accede a una plataforma digital y con datos básicos como el DNI, se le da una oferta de crédito de consumo. El colaborador acepta y se hace el desembolso en la cuenta donde se depositan los haberes.

“Con esto, la empresa lo que hace es que a fin de mes, cuáles son las personas que accedieron al crédito y a cuáles trabajadores hay que descontarle”.

El monto mínimo está relacionado con el salario del trabajador y el máximo es de S/ 25 mil. “Independientemente del monto, buscamos que el usuario tenga un endeudamiento sano. Que tenga la confianza que puede acceder a un crédito, sin sentirse ahorcado.”

Finalmente dijo que el colaborador solo tiene que estar trabajando como mínimo 3 meses y formalidad en el contrato. En el caso de ser despedido o renunciar meses después de adquirir el crédito, la liquidación va para el. En caso que este monto no cubra, se hace la cobranza al trabajador. La empresa se desligará de ello.