Una de las medidas del Gobierno para apoyar a las empresas y reforzar la cadena de pagos es la creación del programa Reactiva Perú.
Con este, el Estado busca garantizar créditos de capital de trabajo a tasas preferenciales para que el empresariado peruano pueda afrontar sus obligaciones a corto plazo con colaboradores y proveedores.
Sin embargo, tras su anuncio muchos expertos comentaron que, a pesar de ser una buena medida, requería de ciertos ajustes para poder cumplir su objetivo.
La primera crítica, y la más comentada, es la cobertura de la garantía y, por ende, la tasa de interés a la que serían otorgados estos préstamos.
La garantía debió ser del 100%, y no menor, pues se quiere que los créditos salgan de una manera rápida y a un costo razonable, pero al no cubrirlo totalmente, las entidades financieras tienen espacio para aumentar la tasa, señaló recientemente Carlos Oliva, exministro de Economía.
“En un escenario de garantía total al cliente le debería llegar a una tasa de 2%, que en términos reales es 0%, sin embargo, como las entidades financieras están arriesgando 2%, 5% o 10% y por más que lo reciban a una tasas de interés de 1%, lo que puede pasar es que presten a 10%”, aseveró.
Jorge Solis, presidente de Caja Huancayo, coincide en que la garantía del Gobierno debería cubrir el 100% para que sea más ágil y rápida, pues la única rentabilidad que se busca es la social, por lo que el costo de los préstamos no debe ser elevado.
Otra sugerencia de algunos economistas es que el programa debería incluir al sector informal que es el más afectado.
"La medida está atendiendo solo a la epidermis y excluye a las microempresas informales, son cerca de siete millones de micro y pequeños negocios pero solo 314,000 se beneficiarían", afirmó Solis.
En tanto, Marcelino Encalada, gerente de Ahorros y Finanzas de la Caja Piura, refirió que el programa está formulado principalmente para el sector formal, pues gran parte de la micro, pequeña y mediana empresa no aporta a Essalud ni declara ventas.
“El monto a financiar y la cobertura pierden importancia si no están dentro del programa, primero deben incluirse a la mayoría de estos comercios y luego pensar en los detalles”, comentó.
Una tercera recomendación es el monto otorgado en préstamo que, según el reglamento, sería equivalente a un mes promedio de ventas.
La Asociación de Exportadores (Adex) consideró que se podría incrementar el número de empresas beneficiadas si el reglamento ampliaba de uno a dos meses las ventas promedio.
Asimismo, José Armando Hopkins, vicepresidente de la Cámara de Comercio de Lima (CCL), consideró irreal e insuficiente el monto máximo de los créditos, de hasta un mes de ventas.
Indicó que las empresas ya llevan paradas un mes y faltan semanas para que las actividades se reinicien de forma gradual, todo ello sumado a que el proceso para autorizar las garantías dilatará las operaciones.