FOTO 1 | Fase 1: Poner dinero propio en el negocio
Si arrancas un negocio desde cero, ésta suele ser la fase en la que empiezas. Aquí no estás recibiendo dinero del negocio, al contrario, estás poniendo tu propio dinero en la empresa para pagar los gastos operativos, comprar capital, etc. Por ejemplo, nuestro negocio requirió que invirtiéramos en marketing y en equipo de cómputo mientras no recibía capital.

Decidimos hacer préstamos personales a nuestro negocio para cubrir esos gastos. Además teníamos que pagar nuestras hipotecas y otros gastos. Durante este periodo vivíamos de nuestros ahorros. (Foto: Freepik)
FOTO 1 | Fase 1: Poner dinero propio en el negocio Si arrancas un negocio desde cero, ésta suele ser la fase en la que empiezas. Aquí no estás recibiendo dinero del negocio, al contrario, estás poniendo tu propio dinero en la empresa para pagar los gastos operativos, comprar capital, etc. Por ejemplo, nuestro negocio requirió que invirtiéramos en marketing y en equipo de cómputo mientras no recibía capital. Decidimos hacer préstamos personales a nuestro negocio para cubrir esos gastos. Además teníamos que pagar nuestras hipotecas y otros gastos. Durante este periodo vivíamos de nuestros ahorros. (Foto: Freepik)

Al planear el para el retiro existen varias alternativas como seguros de ahorros, bonos del gobierno, acciones, planes personales para el retiro, caja de ahorro, etcétera, lo cual es de gran importancia para diversificar una inversión de estas características. Sin embargo, hay distintos puntos que debemos tener en cuenta, refiere el consultor de seguros privados Lockton México, por lo que la firma sugiere lo siguiente:

1. Establecer un objetivo de ahorro. Dependiendo de cuál es la razón para , podemos elegir las herramientas o mecanismos que permitan ahorrar la cantidad establecida.

2. Hacer ahorros ordenados y sistemáticos. Cuando se ahorra, generalmente lo que se hace es pagar todas las cuentas u obligaciones del mes y, si sobra algo de dinero, se guarda. Pero si no sobra nada, no se ahorra nada. El debe ser periódico ya que el efecto del interés compuesto hace que el ahorro, por pequeño que sea, pueda significar una gran diferencia en el futuro, pues gana interés sobre interés.

3. Diversificar el ahorro
. Cada inversión implica un riesgo que se debe afrontar. Con la diversificación se puede ayudar a balancear el riesgo, incrementar las recompensas y proteger las inversiones contra las fluctuaciones.

4. Mantenerse informado.
Aquellas inversiones que ofrecen rendimientos muy altos y tasas por encima de las normales, por lo general conllevan un riesgo mayor. Estar al tanto de la información financiera previene la inversión en este tipo de opciones.

Diario El Economista
Red Iberoamericana de Prensa Económica (RIPE)

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