De acuerdo al último reporte del gremio bancario, la tasa de crecimiento anual de este tipo de financiamiento viene desacelerándose desde febrero de este año, mes en el que reportó un avance interanual de 17%. Esta situación se debe al contexto de desaceleración de la inversión privada, que afecta al empleo y por ende al ingreso de las personas.
Otra de las razones de este resultado está referido a la cautela de los bancos en la gestión del riesgo crediticio en los distintos segmentos que usan tarjetas. Así, la mayor cautela de los bancos se evidencia en el menor ritmo de expansión de las líneas de crédito autorizadas para tarjetas de crédito, las que alcanzaron los S/ 74,143 millones en setiembre.
Asimismo, el ratio de monto utilizado entre la línea disponible se posicionó en 31.45%, un nivel inferior en 0.58 puntos porcentuales respecto a setiembre del año pasado. Esta situación revela que el nivel de uso del financiamiento a través de tarjetas de crédito, se mantiene en promedio en los dos últimos años en torno al 32% de la línea autorizada.
Utilización
El financiamiento a través de tarjetas de crédito utilizado por las personas naturales para consumo de bienes o servicios ha mostrado un mayor protagonismo respecto a otros segmentos. Este segmento, en efecto, reportó una participación de 83.08% a septiembre 2016, mayor en 2.27 puntos porcentuales a lo registrado en setiembre 2015.
Mientras que los segmentos restantes, corporativo, grande empresa y microempresa muestran una pequeña participación en el financiamiento con tarjetas de crédito, sumando en conjunto 0.79% a septiembre, dado que éstos se financian con otros instrumentos de crédito.
Número de tarjetas
Este resultado, en opinión del gremio, evidencia una tendencia decreciente en la evolución del número de tarjetas activadas en los últimos años. Con ello, el número total de tarjetas activas al cierre del noveno mes del año llegó a 8.23 millones.
El gremio prevé que en la medida en que se vaya concretando una mejora en la economía, de la mano de un mayor dinamismo en la inversión, que expanda sus efectos al consumo y los ingresos de las personas, es de esperar que también se observe un repunte en el ritmo de crecimiento, tanto en el monto utilizado de tarjetas de crédito, como en el número de éstas.