Redacción Gestión

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"Algo totalmente genial", así describió el crítico de cine de Financial Times, Nigel Andrews, a uno de los ganadores del Gran Premio del Jurado 2014 del Festival de Cine de Sundance: la "maravilla unipersonal" de los documentales acerca de la fiebre del oro de gas de esquisto en Williston, North Dakota, llamada The Overnighters.

Según un artículo de Financial Times, el premio que ganó esta película es una de las cosas que hacen tan especial a Sundance: una categoría llamada cinematografía "intuitiva". Uno no encuentra eso en Cannes.

Sundance, que se celebra cada mes de enero en las profundas nieves de Park City, Utah, fue por supuesto la creación de Robert Redford, y está a punto de celebrar su trigésima primera edición.

Dedicado al trabajo independiente en todos los géneros –con una serie de premios para cortometrajes, los cuales son tomados muy en serio por este festival– la reputación y fortuna de Sundance son muy diferentes de las de sus grandes pares en Venecia, Berlín, Cannes y Toronto. Este festival no es solo una interesante vitrina para el talento independiente sino, tal vez con más frecuencia, un barómetro de las tendencias económicas en la industria.

El hecho de que el día de la inauguración del Sundance del año pasado coincidió con el anuncio de los nominados al Oscar enfatizó a los 45,000 visitantes a la pequeña ciudad de Utah cuánto depende de Hollywood esta industria, y la enorme inversión que se destina a "campañas" por el Oscar en apoyo de una menor cantidad de mega-títulos.

En el pasado, películas independientes como las ganadoras en Sundance serían muy difundidas y felizmente tomadas por los distribuidores, aunque solo sea para un lanzamiento limitado; estos días, según los expertos, la gran mayoría de los grandes trabajos independientes serán vistos solo en vídeo a pedido.

Sin embargo, los cineastas independientes continúan luchando. Los éxitos del año pasado incluyeron al menos una película financiada por una campaña de Kickstarter, como fue el caso de Wish I Was Here (dirigida y protagonizada por Zach Braff, y co-escrita por él y su hermano Adán).

Y seguramente el único proyecto de 12 años de Richard Linklater, Boyhood, que tuvo su estreno en Estados Unidos en el Sundance 2014, sigue siendo un triunfo que desafía las normas de la industria.

Entonces, ¿qué traerán las 120 películas que componen el festival de este año? Bueno, para dar inicio a las actuaciones en la gala de inauguración de Salt Lake City, el mismísimo creador del festival, Robert Redford, estará presente en el filme A Walk in the Woods, que sigue el tema del hombre versus los elementos del 2013: All Is Lost.

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(Robert Redford y Nick Nolte en A Walk in the Woods.)

Esta vez, en lugar de enfrentarse a su fin como un marinero varado, Redford enfrenta peligros más filosóficos en tierra firme, recorriendo el sendero de los Apalaches como un escritor de viajes en compañía de su viejo amigo de la escuela secundaria, interpretado por Nick Nolte. Emma Thompson también aparece en el filme, entre los coloridos personajes que encontraran el par de 'viejos osos'.

Las caminatas del estilo filosófico están muy de moda, con el éxito de Wild, pero A Walk in the Woods promete un sesgo cómico. Y su director, Ken Kwapis, parece una elección sorprendente –al ser más conocido por su trabajo en televisión en episodios de The Office, así como en comedias romanticas como License to Wed y The Sisterhood of the Traveling Pants. Ya veremos…

Otro estreno de gran renombre promete ser el primer largometraje del director de cine británico Rupert Goold, True Story. El filme cuenta con James Franco como el asesino acusado Christian Longo, que cuando lo arrestan extrañamente toma la identidad del deshonrado periodista del New York Times Michael Finkel, interpretado aquí por Jonah Hill. Goold coescribió el guión junto a David Kajganich para esta historia de ingenio psicológico y de improbable amistad.

Aún en la sección de estrenos, y aún en el reino de filmes sobre la vida "real", hay otra incursión posiblemente intrigante en la psique humana: el escritor y director Michael Almereyda nos trae Experimenter, una sombría película biográfica sobre el científico Stanley Milgram, cuyo fascinante pero infame proyecto de "obediencia" de 1961 mostró cómo las personas pueden voluntariamente infligir severo dolor a otros individuos cuando aparentemente reciben órdenes de hacerlo.

Peter Sarsgaard interpreta al extraño pero brillante científico, mientras que Winona Ryder brinda una cuota de glamour como su esposa. Ryder, por cierto, es también miembro del jurado de este año, con lo que se presume que Experimenter está fuera de competencia.

(El experimento de Stanley Milgram)

Otra película en la categoría de estrenos que llama la atención es Brooklyn, dirigida por John Crowley y basada en el libro de Colm Tóibín. Saoirse Ronan interpreta a una joven de la Irlanda rural en la década de 1950 que viaja a Nueva York. Hechos posteriores a este viaje la ponen frente a un dilema desgarrador.

Y si los titulos como A Walk in the Woods le parecen un estilo demasiado estadounidense y muy hollywoodense, el festival pretende eludir esto con una variedad de alternativas disponibles.

Sundance ha desarrollado en los últimos dos años una profunda faceta LGBT (lesbian, gay, bisexual & transgender) y en la sección de Documentales del Mundo de este año un competidor a tomar en cuenta es The Amina Profile, una historia de amor entre dos mujeres dirigida por la canadiense Sophie Deraspe.

Ambientada durante la revolución árabe, pero fundamentalmente enmarcada por las verdades y mentiras de la internet, la película cuenta cómo Amina, de origen sirio estadounidense, paga un alto precio por el blog gay que le otorga un peligroso éxito en Damasco, y cómo su amante virtual que vive en Montreal, Sandra, se embarca en una complicada travesía internacional en su búsqueda. Este podría ser un título a tomar en cuenta en cualquier plataforma de medios disponibles.