El secreto de una buena salud está en la alimentación. Sobre todo para mantener una mente activa y al 100%.
Es conocido que el desayuno es la comida más importante del día, y uno natural puede favorecer la concentración y elevar su rendimiento durante el día.
Este debería incluir cereales con frutas y productos lácteos. Ya sabe, nada de golosinas.
El cerebro utiliza sus últimas reservas durante la noche, y necesita una recarga a primera hora. Por ello es importante la alimentación. Cuestión de eficiencia.
Por otro lado, también es recomendable comer un puñado de bayas a la semana, pues retrasa la pérdida de la memoria en dos años y medio.
Además, acompañar estas dos recomendaciones con una dieta mediterránea, con muchas hortalizas verdes, pescado o pollo, frijoles, cereales integrales y aceite de oliva (más su copa de vino), reduce a la mitad el riesgo de padecer alzheimer.
Conozca más detalles en el video de Deutsche Welle.