Verónica Zambrano es una de las pocas mujeres que preside una entidad en Perú. Desde hace más de medio año, la abogada está a cargo del Organismo Supervisor de la Inversión en Infraestructura de Transporte de Uso Público (Ositran), adonde llegó, según confiesa, con mucho esfuerzo.

De acuerdo a Zambrano, en un mercado donde los hombres lideran la gerencia, las mujeres deben “demostrar de más” para destacar en el mismo ­puesto.

¿Cómo evaluaría el rol femenino actual en las gerencias?
Cada vez hay más apertura. Cada día la mujer va tomando más presencia, pero también hay que demostrar más cosas para llegar ­­ a ello.

¿En qué sentido?
Yo sentí que hasta que no salté con tacos, no demostré que podía ser jefa. Antes la gente no se daba cuenta ni tomaba consciencia sobre ello. Felizmente el panorama está cambiando.

¿Qué cualidades blandas de las mujeres sobresalen cuando ejercen un alto cargo?
Las mujeres tenemos una fortaleza que nos permite salir adelante en situaciones críticas. Vemos muy bien el tema logístico, ­somos ordenadas, sabemos organizarnos y eso ayuda en diferentes situaciones.

¿Qué tipo de jefa se considera?
Una de puertas abiertas, aunque eso implique un costo. Normalmente la gente está entrando y saliendo de la oficina y a veces no puedes tomarte el tiempo para las cosas que necesitas hacer.

Entonces, ¿cuáles son los pros de tener las puertas abiertas?
El acercamiento al equipo, que cada uno de sus miembros sepa que siempre me va a encontrar para conversar de lo que quiera.

¿Qué cualidades cree que debe tener un jefe?
Lo principal es el liderazgo unido a la sensibilidad para acercarse a las personas, pues tienes que convencerlas de la causa de la institución, que no tienen que seguirte a ti, sino al objetivo de la empresa.

¿Cómo se aprende a ser líder?
Es una cualidad innata el liderar equipos, querer dirigirlos. Eso no se aprende en cursos de management.

¿Qué actividades practica en su tiempo libre?
Mi primera actividad es ser mamá, pero también entreno para maratones, las de 42 kilómetros, no las carreras de menos distancia. Ya llevo diez años en esto.

¿Cuánto tiempo en promedio entrena al día o a la semana?
Unos quince kilómetros, a veces diez, pero nunca bajo de esa distancia. Suelo salir a las 5:30 a.m. a correr, lo hago seis veces por semana, en promedio.

¿Cuál ha sido su récord en una maratón?
Cuatro horas y veinte minutos, en una maratón que organizó Adidas.

¿Qué es lo que más le gusta de este deporte?
En la maratón compites contigo mismo, con tus propios récords y eso me encanta. Antes jugaba básquet, pero perdí el gusto por la competencia. Me he vuelto un poco picona (risas).

¿Cuánto tiempo de preparación se necesita para participar en una maratón?
Yo diría que un año junto a una buena dieta. La idea ­ es sacar músculo para correr y también usar la ropa adecuada.

¿Cuáles son los principales beneficios del running en su vida?
El deporte me ayuda a descargar energía y eso es positivo para el trabajo. Por eso yo siempre estoy de buen ánimo. Siento la diferencia cuando lo practico y cuando no. Cuando no ­corro, llego de frente al trabajo a buscar una taza de café.