Ni la calle maldita ni la modelo mirando a la nada pudieron predecir el éxito de Av. Larco, la película, que llevó 151,000 espectadores al cine en su primer fin de semana.

La cinta de (La Gran Sangre) hurga en el túnel de los recuerdos para evocar la nostalgia de los rebeldes años ochenta en un Perú de colas enormes y explosiones recurrentes.

El musical, basado en la obra teatral del mismo nombre, recorre las aventuras de un grupo de muchachos limeños que buscan formar la próxima gran banda de rock.

La cinta es hija de , la casa matriz de las megaproducciones peruanas, por lo que es inevitable olfatear comparaciones con su último hit: Locos de amor.

Ambos musicales con soundtrack similar y con audiencias bastante parecidas en su primer día le encantaron al público peruano. Locos de amor arrancó su primer jueves con sólidos 35,000 espectadores, mientras que Av. Larco alcanzó 32,000, según Maykoll Calderón, especialista en cifras de cine.

El viernes sangriento, el filme de Carmona reportó una ligera caída con 28,000 espectadores. Pero solo tuvo que esperar un par de días para remontar con fuerza.

En total, el primer fin de semana para Locos de amor significó 176,000 asistentes a salas peruanas, 25,000 más que el estreno de Av. Larco. Y si queremos compararlo con el último blockbuster peruano, Cebiche de tiburón llevó 175,000 personas al cine en su primer fin de semana.