1. La obra debe agradar al compradorÁlvaro Roca Rey, director general del MAC, sostiene que una obra brindará, ante todo, un placer cotidiano, por lo que no se debe comprar únicamente por inversión (si ese es el único motivo, es mejor acudir a la bolsa, añade). ¿Acaso cuando uno acude a un concierto, puede, después de un tiempo, vender la entrada por más de lo que se pagó?". Armando Andrade, presidente del comité de subasta del MALI señala que "para comprar una pieza de arte, es fundamental que te guste".

2. Analizar el mercado antes de ofertarAndrade destaca la importancia de reunir información acerca de los autores si es que se quiere revender la obra. Especifica que adquirir trabajos de artistas jóvenes es apostar a futuro. "Cuando compras una pieza de una persona de 20 o 21 años, estás apostando por una mirada, puesto que no tiene una carrera consolidada. Pocos de ellos llegarán a una gran carrera", afirma. Por otro lado, Roca Rey comenta que si buscamos una buena inversión, debemos analizar las altas y bajas de los artistas y consultar con un especialista.

3. Fijar límites y mantener la serenidadLas cifras que recitan los curadores ejercen mucha presión sobre los compradores. Es por eso que Álvaro Roca Rey aconseja mantener la calma en todo momento.

En muchas ocasiones las personas terminan pagando grandes cantidades de dinero sin haber calculado previamente el valor de la pieza. "Se debe fijar un límite antes de pujar y no dejarse llevar por la emoción del momento", recomienda el también museólogo y escultor. Sin embargo, agregó que, si se trata de una subasta como la del MALI, vale la pena la inversión, pues "todo será en beneficio de una buena causa", comentó. Lo recaudado servirá al Museo de Arte de Lima para aumentar sus fondos de adquisición de piezas fundamentales y también para la restauración de las mismas.

4. Verificar la pieza y su autenticidadHace algunos años, a Álvaro Roca Rey le ofrecieron una pintura de Vinatea Reynoso por mucho dinero, sin embargo, luego de consultar con varios especialistas, determinó que la obra era de otro autor (Leonor Vinatea). La compró pagando menos de lo que le pedían al inicio.

La importancia y trascendencia de esta pieza fue tanta que ha sido expuesta en museos de Montreal, San Francisco y Los Ángeles. No obstante, otras personas no la pasaron tan bien cuando compraron una reimpresión de la primera hoja de El Comercio por un considerable precio, eran hojas de 1960 y no del histórico 4 de mayo de 1839.

5. Aprovechar las oportunidadesAndrade señala que, si se tiene la oportunidad de comprar piezas de artistas que están siendo coleccionados por museos en el país o el mundo y, además, tienen exposición en galerías, se debe ofertar. Pues el precio de sus pinturas aumentará y no paulatinamente. Las obras de Regina Aprijaskis, artista peruana que ha participado en más de una ocasión en las subastas del MALI, podían comprarse, años atrás, por menos de US$ 1,500, hoy en día, un cuadro de la autora puede costar hasta US$ 50,000. Internacionalmente, los montos son más grandes