El rematador lo llama "Patek Philippe de Triple Complicación – Vladimir Putin" y estima que podría obtener hasta 1.5 millones de euros (US$ 1.6 millones), más de 50% por encima de lo que habría costado como nuevo hace solo dos años.

Pero el Kremlin dice que Putin –conocido por su debilidad por los relojes de lujo– no tiene nada que ver con él.

Monaco Legend Group, que organiza la subasta del 19 de julio en sociedad con Antiquorum, dice que el reloj de caja de platino fue comprado para regalarlo al presidente ruso en una tienda de Londres en el 2015.

El comprador no identificado fue lo bastante convincente sobre su intención de comprar el reloj para Putin que la tienda registró a "Mr. Vladimir Vladimirovic Putin" –el nombre completo del líder– como el dueño en el certificado de origen. Un gerente de la tienda, Watches of Switzerland, prefirió no hacer comentarios.

"Hasta donde sabemos, este reloj fue comprado por una persona muy importante para regalárselo a Vladimir Vladimirovic Putin", dijo por correo electrónico Annabelle Farras, directora de subastas de Monaco Legend. La casa de subastas no ha contactado al Kremlin con motivo de su proveniencia, añadió.

Pero el portavoz del Kremlin, Dmitry Peskov, dice que la vinculación con su jefe es una "noticia falsa", negando que alguien alguna vez haya intentado agasajarlo regalándole el reloj.

Tarjeta de garantíaMonaco Legend, una casa de subastas de tamaño medio, dice confiar en la vinculación con Putin y espera que el reloj obtenga entre 900,000 y 1.5 millones de euros. En el comercio minorista, el reloj tiene un precio de cerca de US$ 1 millón, pero solo se vende por invitación.

"Si decidieron escribir Vladimir Vladimirovic Putin en la tarjeta de garantía, significa que tienen toda la prueba y documentación para hacerlo", dijo Farras. Los fabricantes de relojes de alta gama suelen tratar de asegurarse de que sus productos se vendan directamente a la persona que los usará para evitar a los revendedores.

Hay relojes raros vendidos en remate por más de US$ 1 millón. En mayo, Christie's remató un reloj pulsera Patek Philippe que solía pertenecer al emperador etíope Haile Selassie por US$ 2.9 millones.

El mismo mes, Phillips vendió un Rolex que había pertenecido al último emperador de Vietnam por US$ 5 millones, un precio récord para cualquier reloj pulsera Rolex en subasta. En noviembre pasado, un Patek Philippe extremadamente raro –uno de solo cuatro que se sepa que existen en el mundo– hizo caer el martillo por US$ 11 millones, la cifra más alta jamás pagada en subasta por un reloj pulsera.

Putin es conocido por su amor a los relojes caros a pesar de su imagen pública de hombre de gustos modestos y un ingreso anual oficialmente declarado de 8.9 millones de rublos (US$ 156,000).

En el 2009, durante una visita oficial a una fábrica de Tula, una ciudad industrial al sur de Moscú, Putin pareció sorprenderse cuando un obrero le pidió su reloj para guardarlo como recuerdo.

Después de recuperar su aplomo, Putin le entregó el Léman Aqua Lung Grande Date que llevaba puesto, dice en su portal de internet Blancpain SA, fabricante suizo de relojes de alta gama.