Aun después del periodo de cuarentena la pandemia del COVID-19 mantendría locales sociales cerrados. Y si bien ello llevaría a las familias a reunirse más en casa, los peruanos ya habrían estado preparados.
Según el estudio Adulto peruano 2020, de Ipsos Perú, alrededor del 60% de adultos peruanos (personas de 36 a 59 años del Perú Urbano) ya solía realizar eventos en el hogar antes de la pandemia, reflejando así una tendencia al alza.
“El 40% decía que se quedaba en casa más que hace dos años, por ejemplo”, comentó Javier Álvarez, director senior de Trends de la empresa, tras considerar que tal hábito será aún mayor cuando acabe la cuarentena.
Por tipo de actividad, el estudio indica que el principal evento que los peruanos celebran en casa es el cumpleaños (48%), seguido de parrillas (35%), fiestas (34%) y reuniones para ver partidos de fútbol (26%).
“Los peruanos somos más ciudadanos de casa, más que de calle. No tiene que ver con la timidez, sino con la comodidad y también con el presupuesto”, anotó, tras reconocer que el miedo al contagio del COVID-19 será un nuevo factor de decisión.
En ese caso, estimó que habrá un grupo de personas que visitará padres, abuelos y otros familiares en reuniones tras la cuarentena, pero otros seguirán en aislamiento total como prevención. En tanto, esperó que no sean más del 10% quienes desacaten las medidas de prevención.
La comida y las apps
A partir de la pandemia por el COVID-19, la alimentación se ha convertido en un rubro muy sensible por el riesgo de contagios que implica. Ante ello, muchas personas han tenido que cambiar hábitos que ya habían hecho parte de su vida.
Según el estudio de Ipsos Perú, el 82% de adultos peruanos acostumbraba a comer fuera de casa, principalmente, los fines de semana, en una tendencia que iba al alza por el boom gastronómico que experimentó el país.
“Ahora ese hábito se suspenderá. La gente llevará su lonchera si va a ir al trabajo, pero también puede retomar la costumbre. Si en tres semanas ve que no hay contagios en el trabajo, se gana confianza y quizá se vuelva a comer en la calle”, mencionó.
Agregó que la seguridad que brinden las empresas de restaurantes y menores estadísticas de contagios también jugaría a favor.
En tanto, este negocio apuesta fuertemente por el delivery, que en el Perú ya era empleado por el 19% de los adultos. “Ahora esto se incrementará”, puntualizó Álvarez.