Aproximadamente hace 30 minutos, el delantero peruano Paolo Guerrero y el presidente de la Federación Peruana de Fútbol (FPF), Edwin Oviedo, llegaron a la sede de la Federación Internacional de Fútbol Asociado (FIFA) para reunirse con su presidente Gianni Infantino.

Mediante su cuenta de Twitter, la FPF confirmó el arribo de ambos a la sede de la FIFA y agradeció la "excelente hospitalidad brindada a su llegada a Zurich (Suiza).

Guerrero busca obtener una amnistía que suspenda la sanción de 14 meses impuesta por el Tribunal de Arbitraje Deportivo (TAS) y así jugar el mundial de Rusia 2018 con la selección de Perú.

Por su parte, la FIFA confirmó que su presidente, Gianni Infantino, recibirá durante el día al capitán de la selección peruana de fútbol Paolo Guerrero, privado de Mundial por una sanción por dopaje.

Según un cable de la agencia AFP, el ente rector del fútbol mundial confirmó en un correo electrónico que "la Federación Peruana de Fútbol solicitó una reunión con el presidente Gianni Infantino".

El encuentro tendrá lugar "el día de hoy en la sede de la FIFA en Zúrich en presencia del presidente de la Federación Peruana Edwin Oviedo y del jugador Paolo Guerrero", agregó la FIFA.

Guerrero quiere defender su caso ante Infantino y está respaldado por el sindicato de jugadores profesionales (FIFPro), que escribió a la FIFA "para pedirle que autorice al capitán de Perú participar en el Mundial".

En un comunicado, FIFPro explicó que pidió "una reunión urgente con la FIFA" porque considera la sanción "injusta y desproporcionada" en la medida en que "se estableció que no había ninguna intención de hacer trampa".

Tras el partido Perú-Argentina, el 5 de octubre por las eliminatorias sudamericanas, Guerrero dio positivo por el metabolito de la cocaína benzoilecgonina, una sustancia incluida entre los productos prohibidos de la Agencia Mundial Antidopaje (AMA).

La FIFA anunció en diciembre que la suspensión de un año infligida al delantero del Flamengo (Brasil) se había reducido a seis meses y terminaba el 3 de mayo, lo que debía permitirle disputar el Mundial.

Pero el jugador de 34 años apeló a finales de enero esta decisión, pidiendo que se anulara la decisión de suspensión y que no se le impusiera ninguna sanción.

Por su parte la Agencia Mundial Antidopaje (AMA) presentó un recurso el 19 de febrero pidiendo una suspensión de al menos un año.

La semana pasada el TAS anunció que a raíz de estos dos recursos la suspensión del jugador pasaba de 6 a 14 meses, lo que deja a Guerrero sin Mundial.