Coca-Cola
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El máximo ejecutivo de , James Quincey, está poniendo en marcha una iniciativa de reciclaje, como parte de los esfuerzos para mejorar la imagen del gigante de las bebidas.

La compañía de refrescos, que opera en más de 200 países, se está fijando el objetivo de reciclar una botella o lata por cada botella o lata vendida para el año 2030. También se compromete a convertirse en un líder corporativo en la que han obstruido océanos y vías navegables.

El plan de Coca-Cola es guiar a los consumidores a través del proceso de reciclaje mediante la divulgación educativa, según un comunicado publicado el viernes. También quiere asegurarse de que todos sus envases sean, de hecho, reciclables y que estén hechos con proporciones crecientes de materiales reciclados. La compañía apunta a un promedio del 50% de contenido reciclado para sus botellas para el año 2030.

El productor de bebidas, de 132 años de antigüedad, está apostando a que un mejor comportamiento medioambiental aumentará su credibilidad ante los consumidores, que se han vuelto cada vez más expresivos al exigir que las empresas se comporten de manera responsable. McDonald’s Corp., también a menudo criticada por la basura que generan sus envases, anunció esta semana que está aumentando el reciclaje y el uso de materiales más respetuosos con el medio ambiente.

"Problema global"
Los "es un problema global que es muy visible desde el punto de vista del consumidor externo y de las partes interesadas", dijo Ben Jordan, director sénior de política ambiental de Coca-Cola, en una entrevista.

Para las grandes compañías, la presión para actuar es cada vez mayor. A principios de esta semana, la Unión Europea anunció una nueva estrategia para asegurarse de que todos los envases sean reciclables para el año 2030 y para frenar los artículos que tienen un solo uso, como los cubiertos y las botellas.

Mientras tanto, la primera ministra británica, Theresa May, delineó un plan similar, diciendo que el uso de plástico desechable es "una de las grandes lacras ambientales de nuestro tiempo".

Actualmente, solo se recicla alrededor del 10% del plástico a nivel mundial, y el resto se acumula en vertederos y desfiladeros para luego terminar en el océano. Al ritmo actual, habrá más plástico que peces en los océanos para el 2050, según un informe de la Fundación Ellen MacArthur, que es uno de los socios de Coca-Cola para la nueva iniciativa.

Los objetivos de reciclaje de Coca-Cola son un reto, dado el mosaico de diferentes reglas estipuladas por las naciones, los estados y los gobiernos locales. Los artículos como las bolsas de jugo y las botellas de plástico PET promocionales son especialmente difíciles de reciclar. Entretanto, la inmensa escala global de la compañía complica aún más los esfuerzos.

Pero, si tiene éxito, el plan podría derivar en un ahorro de costos porque Coca-Cola podría proporcionar una cantidad creciente de su propio material de envases, dijo Jordan. El mayor desafío, sin embargo, puede ser el gusto: no todos los materiales de envase pueden mantener la misma calidad.

Con algunos envases, el desafío también es hacer que funcionen, dijo Jordan. "Se trata de superar esas barreras".