Gunther Vicich
Gunther Vicich

Gunther Vicich ya suma 25 años de experiencia como empresario. Ha sido director de D’nnos Pizza, gerente general del Kartodromo Racing Dakart y al día de hoy dirige el Boulevard de Asia, un espacio del cual se declara fanático.

“El centro comercial se crea con mi generación”, afirma al recordar los veranos que pasaba ahí hace casi veinte años.

¿Conoce el origen del apellido Vicich?
Es de origen yugoslavo. Mis abuelos, mi padre y su hermano vinieron a Perú después de la Segunda Guerra Mundial, alrededor del año 1947, luego de moverse de país en país. Mi padre tenía cinco años en ese momento y al venir perdieron conexión con los pocos parientes que pudieron haber quedado.

¿Sabe por qué escogieron el Perú como destino?
Mi padre me contó que inicialmente iban a ir a Argentina, pero un barco salía antes a Perú, así que vinieron y acá se quedaron. Mi abuelo llegó a ser un empresario industrial, tenía una fábrica de adhesivos. Finalmente terminó radicando en ­Estados Unidos.

¿Tiene planes de viajar y conocer sus raíces?
Me gustaría. He viajado a Europa, pero no he tenido la suerte de llegar a esa zona. En un próximo viaje planificaré ir unos cuantos días y , quién sabe, tal vez encuentre algunas personas a las que me parezca

¿Sus hijos le preguntan por ese lado de la familia?
Uno de ellos sí, siente algo de curiosidad. En realidad ellos también tienen algo de origen italiano, así que cuando hay un partido Serbia contra Italia puede haber conflicto (risas).

¿Están planeando seguir a la selección peruana en Rusia?
Me encantaría ir, pero por ahora no. Los proyectos pendientes requieren bastante dedicación y no podría estar 15 días al otro lado del mundo. Además, sería difícil ir con mis tres hijos y su mamá. Me matarían si no llevo a alguno de ellos.

¿Cuáles son los proyectos que está preparando?
Son básicamente profesionales. Estoy a cargo del proyecto del Boulevard, que consiste en implementar una nueva visión. Este es un centro comercial que, a diferencia de los otros, se crea como un lugar de estilo de vida. Queremos regresar a los orígenes y alinear este concepto con el deporte, la cultura y el entretenimiento.

¿Qué es lo que más lo motiva de su cargo?
Mi proyecto empresarial es tratar de aportar a la sociedad a través de mis acciones. El reto de encargarme del Boulevard lo tomé porque soy ‘boulevardlover’ y, aparte de ser público usuario, también soy locatario.

¿Usted pasaba sus veranos ahí?
Sí, me gusta mucho la playa y practico surf, además de tenis. También practico el kartismo como principal deporte, esa es mi pasión pues llegué a ser campeón nacional. Mi padre fue corredor de autos y de alguna manera mis hermanos y yo hemos seguimos la línea. También me gusta cualquier deporte que tenga que ver con el motor.

¿No le resulta difícil separar el trabajo de la vida personal?
No me resulta difícil, pero puedo estar haciendo una actividad no laboral y pensar en cosas del trabajo. No necesariamente en temas estresantes, sino ideas. Toda mi vida he sido un poco 24/7, no se puede terminar de trabajar y desconectarse por completo.

¿Considera que el surf es una manera de inspirarse?
Por supuesto. El deporte de la tabla, a diferencia de otros, es un estilo de vida. Gracias a él puedes estar en contacto con la naturaleza y te brinda muchos momentos solo, en que puedes pensar.