La fiebre del fútbol puede degenerar en comportamientos lamentables de parte de los hinchas en Rusia 2018. (Foto: AFP)
La fiebre del fútbol puede degenerar en comportamientos lamentables de parte de los hinchas en Rusia 2018. (Foto: AFP)

La inmensa oleada de hinchas latinoamericanos que invadieron ha obligado a que los organizadores de Catar 2022 ajusten sus planes.

Decenas de miles de aficionados se congregaron en el centro de Moscú, incluso en días en que no jugaba su equipo. Si un número similar de visitantes quisiera reunirse en Doha, una ciudad mucho más pequeña, ésta podría lucir repleta durante las primeras dos semanas del certamen, que se realizará en noviembre del 2022.

En las calles aledañas a la Plaza Roja, seguidores de Perú, México y Argentina hicieron sentir su presencia desde los días previos a la Copa del Mundo.

“Lo que vimos en Moscú, que tiene dos estadios, fue que una ciudad puede quedar rápidamente abrumada por las multitudes”, explicó Nasser Al Khater, prominente funcionario catarí, en la capital rusa. “El hecho de que vayamos a tener a los aficionados de los 32 equipos prácticamente en la misma ciudad creo que será electrizante”.

Con ocho estadios en Doha o a una hora de esa ciudad, el Mundial implicará probablemente aglomeraciones durante 28 días en el pequeño emirato de apenas 2.58 millones de habitantes.

“Queremos que esto se apodere de Doha”, dijo Al Khater, quien avizora posibles cambios. “Luego de ver la gente y cómo se moviliza, y de imaginar la forma en que será el flujo del tráfico en Catar, estamos reconsiderando dónde realizaremos nuestro Fan Fest”.

Todas las ciudades mundialistas deben contar con un espacio para que se concentren los hinchas y vean los partidos en pantallas gigantes. El Fan Fest de Moscú se ha realizado en el sur de la ciudad, pero Catar tenía contemplado el céntrico Parque Al Bidda, junto a la Bahía de Doha.

“Está en el lugar equivocado”, reconoció Al Khater. “En realidad, obstruiría el libre tránsito de las personas”.

Es probable que a Doha lleguen más fanáticos de Europa. En Rusia, fueron menos de los esperados, aunque a semifinales llegaron sólo cuatro equipos europeos.

“Me pregunto: ¿dónde están los aficionados europeos?”, dijo Al Khater. “No sé si va a ser lo mismo en Catar. La gente lamenta no venir al Mundial. Ha habido fútbol increíble y un ambiente asombroso”.

Los organizadores del Mundial del 2022 enviaron a 180 empleados hacia Rusia, para observar detalles de cómo se organiza un certamen de esta envergadura. Entre las ideas que podrían adoptar está la Fan ID, una credencial con fotografía que exime al portador de tramitar una visa. Este procedimiento ha permitido que las autoridades rusas monitoricen además a personas consideradas una amenaza de seguridad, y tengan información de quién ingresó a un estadio.

Algunos habían considerado que estas identificaciones conllevaban un riesgo para la privacidad de los datos. Sin embargo, muchos hinchas las consideran ahora una reliquia.

“Pienso que esto funcionó bien. Vamos a analizar la Fan ID, para ver si es una forma de cerciorarnos de que sabemos quién ingresa a Catar”, dijo Al Khater, quien describió la organización de Rusia 2018 como impecable. “Tendremos un precedente difícil de superar”.