(Bloomberg) Claude Berda, que este año vendió la emisora francesa AB Groupe, se sumó al grupo cada vez mayor de ciudadanos franceses que están invirtiendo en el mercado inmobiliario de Portugal a medida que acelera la economía de ese país y suben los precios de las propiedades.

Berda dice que comenzó a tener en cuenta los inmuebles portugueses hace dos años, cuando su hijo, Rolland, le pidió que visitara el país. Desde entonces, compró diez edificios en Lisboa, un resort en la región del Algarve, al sur del país, y 350 hectáreas de terrenos en Comporta, un retiro costero a una hora en auto de Lisboa.

Berda planea invertir 450 millones de euros (US$ 490 millones) en la adquisición y el desarrollo de esas propiedades antes de venderlas, y busca financiamiento bancario para algunos proyectos.

"Definitivamente, Portugal es mi próximo gran proyecto", dijo Berda en entrevista desde Lisboa. "Pasé cierto tiempo con agentes inmobiliarios y ellos están buscando propiedades para vender. No tienen suficientes productos. El mercado es muy bueno y fuerte".

El mercado inmobiliario portugués suscita cada vez más interés de los franceses, que el año pasado superaron a los británicos como principales compradores extranjeros de propiedades en el país, según la Asociación Portuguesa de Profesionales y Agentes Inmobiliarios.

Bajo el llamado "programa de residencia no habitual" de Portugal, los jubilados extranjeros que vengan a vivir al país pueden conseguir que el ingreso de su pensión quede eximido de impuestos siempre y cuando lo pague una fuente externa.

El país también ofrece permisos de residencia a los no europeos que inviertan más de 500,000 euros en bienes raíces. Ambos programas son imanes de compradores extranjeros, entre ellos ciudadanos franceses que quieren pagar menos impuestos y chinos que buscan una casa en Europa.

Récord de inversiónLa inversión inmobiliaria en Portugal podría alcanzar el récord de 2.000 millones de euros este año, frente a 1,300 millones de euros en 2016, dijo el 4 de enero Eric van Leuven, el socio administrativo de Cushman & Wakefield en Portugal.

Los precios de las casas en Lisboa subieron 23% el año pasado, según Confidencial Imobiliário, una empresa que recopila datos sobre mercados de bienes raíces.

Aunque las autoridades de Lisboa recibieron bien la inversión extranjera, esta llevó los precios de los inmuebles a niveles que hacen que a los nativos les cueste vivir en el centro de la ciudad, dijo en diciembre Manuel Salgado, el concejal responsable de planificación y renovación urbana.

Relativamente barataBerda dice que Lisboa sigue siendo relativamente barata en comparación a otras ciudades europeas.

"Tendrían que pagarme para vivir en Londres", dijo Berda, y agregó que su apuesta a los inmuebles de Portugal constituye una nueva etapa de su carrera tras la venta de AB Groupe, la emisora que fundó en 1977, a Mediawan por cerca de 270 millones de euros. "Es el fin de una historia y el comienzo de otra".

El hombre de 70 años viaja unas dos veces al mes de su casa en Suiza a Portugal para visitar las oficinas de Vanguard Properties, su inmobiliaria con sede en Lisboa, administrada por su hijo Rolland y un socio local.

"Conozco bastante a los portugueses", dijo Berda, que vendía camisetas en Portugal cuando dirigía una empresa de indumentaria hace más de dos décadas. Mudarse definitivamente al país "es una posibilidad".